La dirigencia lo considera intransferible en el mercado de pases doméstico. El defensor puede ser transferido por una cifra superior a la asignada, y el futuro en Europa es una de las variables, ya que en Avellaneda proponen una prestación de futbolistas con la opción de compra.
Como pocas veces ha ocurrido, el proceso de transferencias minimizo algunos costos del mercado. El mundo ya no considera las cifras millonarias que el fútbol argentino dispone, y hasta el más preciado futbolista, ahora cuenta con una vidriera trastocada por la incertidumbre existencial en la industria deportiva.
En Banfield no solo quedó en estambay la salida de Agustín Urzi a Europa. Claudio Bravo es otra de las preferencias de algunos equipos del ámbito argentino y exterior. Si bien se desempeña como defensor y su estadística de goles no es la del volante creativo, el lateral conserva la referencia de varios clubes, por su juventud y las aspiraciones personales que manifestó en diferentes oportunidades.
La contratación del “Taladro” persistirá hacia junio del 2021, pero en Independiente Lucas Pusineri anuncio a la dirigencia las preferencias por incluirlo en el plantel. La posible partida de Juan Sánchez Miño, genera este pedido instantáneo, porque el sector izquierdo de la defensa, queda desestabilizado.
No obstante, la dirigencia de Lucia Barbuto solo transferirá al defensor si recibe el monto disponible de transferencia. Propio producto de las inferiores, el único medio es la inversión, y la dirigencia de Independiente, predispone de un préstamo con intercambio de jugadores, la opción de adquisición de ambos, y negociar el 50% del fichaje del defensa con un plan de pago.
Dada las circunstancias y la volatilidad que esto podría producir, en el sur no harán lugar al traspaso.
Autor: Gabriel Vázquez
