Desde las 22 hs, en San Juan, Boca enfrenta a Paranaense. El Xeneize viene de vencer a Universitario y Russo mete siete cambios.
A una semana de la reanudación de la Superliga, el Boca de Russo tendrá su segundo examen en la noche de San Juan. Desde las 22 hs se medirá con Atlético Paranaense de Brasil en un duelo que se supone de envergadura.
El Xeneize viene de derrotar el jueves, también en el Bicentenario, a Universitario de Perú por 2-0 con goles de Sebastián Villa y Wanchope Abila, posteriormente expulsado.
Russo quiere darle minutos a todos por eso mete siete cambios en el equipo respecto a los que jugaron con los peruanos. Sólo repiten Marcos Díaz, Emanuel Reynoso, Sebastián Villa y Franco Soldano.
Los once de Boca serían entonces Marcos Díaz; Leonardo Jara, Paolo Goltz, Junior Alonso, Emmanuel Mas; Iván Marcone, Emanuel Reynoso, Mauro Zárate, Agustín Obando; Sebastián Villa y Franco Soldano.
Russo apostaría por un 4-1-3-2 y Guillermo Pol Fernández, hasta ahora único refuerzo del Boca, sumaría minutos desde el banco.
Vale recordar que el entrenador no cuenta para este partido con Esteban Andrada y Agustín Almendra (lesionados); y Jan Hurtado, Alexis Mac Allister y Nicolás Capaldo (afectados al Torneo Preolímpico de Colombia).
Julio Buffarini, que estará entre los relevos, manifestó ayer que “estamos contentos, terminando la pretemporada, agarrando la idea de Miguel para llegar de la mejor manera al próximo fin de semana. La idea es jugar bien, tener buen trato de pelota, asociarse y tratar de ser más punzantes hacia adelante y ser más ofensivos”.
Consultado respecto al trabajo llevado a cabo en esta pretemporada, el lateral señaló “tenemos que agregarle cosas a la parte defensiva, hicimos buenos partidos y ahora tenemos la obligación de mejorar de mitad de cancha hacia adelante porque tenemos jugadores de buen pie y de jerarquía”.
A lo largo del año pasado, Boca y Paranaense se enfrentaron en cuatro ocasiones por Copa Libertadores. En fase de grupos (victoria de cada uno como local) y en octavos de final donde el Xeneize se quedó con la eliminatoria tras vencer en la ida en Brasil y en la revancha en la Bombonera.
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