Russo dejó la dirección técnica de San Lorenzo para marcharse a Boca. La partida del DT era un hecho aunque las formas molestaron en el Ciclón. Ayude, entrenador de la Reserva, se perfila para reemplazarlo.
La derrota con Platense en las semifinales, no solo marcó la eliminación de San Lorenzo del Torneo Apertura de la Liga Profesional. También significó la partida de Miguel Ángel Russo de la dirección técnica del club de Boedo. Las formas y la rescisión del vínculo, tiñeron de un sabor amargo un paso más que aceptable del experimentado entrenador. Ahora será tiempo de barajar y dar de nuevo en el Cuervo.
Esta tarde, Russo fue presentado oficialmente en su nuevo club y afirmó “Boca aparece cuando nosotros quedamos eliminados. Para que vean lo que es el fútbol, los códigos y las maneras”. Más allá de esta declaración, la salida del DT del Ciclón despertó un gran malestar puertas adentro y nadie cree en su versión. En la víspera al partido con el Calamar, los rumores de una posible partida al Xeneize ya eran de público conocimiento.
“San Lorenzo y el entrenador llegaron a un acuerdo para dar por finalizado el vínculo entre las partes que tenía vigencia hasta el 31 de diciembre de 2025. De este modo, Russo dejó de ser formalmente el entrenador del primer equipo, aunque el martes ya se había despedido del plantel y había abandonado el cargo en forma unilateral”, comunicó en redes sociales San Lorenzo la semana pasada.
Era un hecho que Russo, más allá del interés de Boca, tenía decidido partir. Los conflictos institucionales en San Lorenzo, con el atraso salarial como punto central, sumado a otras situaciones, como la medida de fuerza del plantel en la previa al partido con Argentinos, hicieron mella en el entrenador. El llamado del Xeneize, sumado a lo antes narrado, fue el detonante final a su decisión.
El monto de la rescisión del vínculo –San Lorenzo canceló previamente parte importante de la deuda que mantenía con Russo– fue lo que demoró la salida del DT. Según a quién se escuche, la cifra que recibió San Lorenzo, como compensación por la interrupción del vínculo, rondaría entre los 350 y 900 mil dólares. El entrenador tenía contrato hasta fin de año con Boedo.
Russo puso de pie a un San Lorenzo de rodillas a su llegada. De penar en los últimos puestos de la tabla a jugar las semifinales del torneo y sin refuerzos de jerarquía en el receso de principios de año. Sin Miguelo, Damian Ayude, DT de la Reserva se perfila para ocupar su lugar. Serán prioridad los juveniles, con austeridad en lo económico y a la espera de la salida segura de varios jugadores.
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