River empató sin goles contra Rosario Central y dejó pasar la oportunidad de descontarle puntos a Boca. En un desarrollo muy parejo, el visitante tuvo las más claras en la primera mitad y el local lo hizo en la segunda.
River no se jugaba un partido más. Con el resultado de Boca de ayer, sabía que en caso de ganar iba a tener la chance de quedar como único líder en caso de vencer el próximo miércoles a Atlético Tucumán . Sin embargo, no fue solo la presión el causal del empate, sino que enfrente tuvo a Rosario Central, que jugó con los dientes apretados y no le permitió tener la fluidez con la que suele jugar.
El partido se sabía atractivo desde la previa. Ambos equipos querían prolongar su buen momento futbolístico, pero la importancia del encuentro terminó por armar un trámite más de lucha que de buen juego. River no encontró nunca a sus delanteros y apenas inquietó a Diego Rodríguez en la primera parte. Central, por su parte, armó algunas buenas jugadas como para inquietar a Augusto Batalla, pero casi siempre con un jugador en posición prohibida, al menos a instancias de Fernando Rapallini y sus asistentes.
De un saque de arco del Ruso Rodríguez, Teo Gutiérrez quedó en una buena posición, enganchó ante Jonatan Maidana y definió, aunque sin la fuerza necesaria para vencer a Augusto Batalla. Fueron necesarios treinta y cinco minutos para que llegue la primera opción de riesgo. Instantes después, el Canalla volvió a llegar en forma peligrosa con una gran jugada colectiva que Marco Ruben culminó con un cabezazo por encima del travesaño. El equipo de Paolo Montero fue más en la primera parte.
Poco había pasado desde el reinicio de las acciones, cuando apareció Sebastián Driussi. El goleador probó al arco desde afuera del área y la pelota dio en el palo derecho del arquero. El equipo de Marcelo Gallardo seguía con dificultades para llegar con peligro, pero el rival ya no tenía la firmeza del primer tiempo. Montero tomó nota y mandó a la cancha a Mauricio Martínez por Gustavo Colman, que venía cumpliendo una buena actuación.
Recién a falta de quince minutos para que termine el partido se despertó el Millonario. Lucas Alario definió cruzado tras deshacerse de Javier Pinola por primera vez en la tarde noche, pero el remate fue desviado al córner por el Ruso Rodríguez. Segundos más tarde fue Driussi el que casi convierte con un cabezazo que salió muy cerca del palo. Tras la pequeña ráfaga, el encuentro transcurrió como casi durante los noventa minutos y terminó en empate en cero.
La paridad le quedó bien a un partido en el que ninguno de los dos perdió nunca la compostura, y en el que ambos lo jugaron con más ganas que fútbol. River perdió una oportunidad inmejorable para depender de sí mismo en la definición del campeonato, pero lo cierto es que enfrente tuvo a un equipo muy firme e inteligente que lo logró mantener lejos de su arquero casi todo el partido.
Fotos: Prensa River
