En los alrededores del Nuevo Gasómetro aparecieron pasacalles contra los jugadores y la Comisión Directiva. El sábado el Ciclón se mide con Huracán y el ambiente es tenso.
La paliza que le propinó Central Córdoba a San Lorenzo aún retumba en Boedo. El 0-4 golpeó duro y el clima está caldeado. Nada menos que en la previa del clásico con Huracán del sábado. La paciencia de los hinchas, tras varios años de frustraciones deportivas, está colmada y así lo hacen saber en redes sociales. Aunque hoy también lo pusieron de manifiesto de manera palpable.
Esta mañana aparecieron en las cercanías del Pedro Bidegain pasacalles con mensajes contrarios a jugadores y dirigentes. En ellos se leía “Jugadores cagones, esto es San Lorenzo” y “Basta de mercenarios y jugadores mediocres”. Pero también hubo “personalizados”: “Tinelli y Moretti no traicionen a San Lorenzo con negociados”. Peor clima, imposible.
Los resultados no acompañan hace tiempo al Cuervo. Pasaron varios técnicos, refuerzos que dejaron mucho que desear y el Azulgrana continúa penando. A eso se suma una situación económica cuanto menos dudosa. El proyecto del regreso a Tierra Santa ya no alcanza para apaciguar los ánimos de la parcialidad de San Lorenzo.
Desde la dirigencia apuntan contra la oposición por los pasacalles. Asumen errores cometidos, pero aducen que no es el momento ideal para echar leña al fuego. Además se jactan del triunfo contundente en las elecciones de 2019 que llevaron a Marcelo Tinelli a la presidencia del club.
El ambiente no es el ideal en la antesala del clásico. Bajo este clima enrarecido entrenó esta mañana el plantel comandado por Diego Dabove. Luego de la goleada ante el Ferroviario, el equipo para enfrentar al Globo es una incógnita. Aunque es indudable que habrá cambios. Cuantos, no se sabe, pero tal como afirmó el entrenador post derrota “estamos lejos de haber encontrado el once”. Muchas chances de que debute el último refuerzo, Yeison Gordillo. Después, puede pasar cualquier cosa.
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