En el Morumbí se cruzaron los caminos de Brasil y Venezuela. La verdeamarelha llegaba con 2 victorias en el bolso mientras que la vinotinto no había cosechado puntos en lo que iba de las eliminatorias. Todo hacia suponer que el Scratch tenía un trámite en casa pero esos no eran los planes de la selección dirigida por el portugués Peseiro.
Brasil extrañó horrores la ausencia de Neymar. El primer tiempo pasó sin muchas emociones; una Venezuela ordenada, prolija sin muchas luces pero con orden le cedió la pelota y el terreno al local y no pasó grandes sofocones pese a un gol bien anulado por fuera de juego de Richarlison.
Y en las pocas situaciones claras que tuvieron los de Tité apareció Farinez para ahogar el grito sagrado.
En la segunda parte Venezuela se confió demasiado por lo hecho en la primera parte y prácticamente renunció a atacar y si bien Brasil no tenia muchas ideas siguió insistiendo por mandato histórico.
La vinotinto pagó el precio a la avaricia cuando Brasil se puso en ventaja a los 22´, centro de Everton Ribeiro, Lodi que la baja de las alturas y Firmino que la empuja en el área chica. Ya con la ventaja el local se tranquilizó y espero que Venezuela salga un poco del encierro para aprovechar los espacios.
Y los últimos minutos transcurrieron ante la impotencia de una Venezuela que hasta pareció conformarse con perder por poco y un Brasil que pese a jugar un flojo partido se quedó con una nueva victoria que le permite sumar puntaje perfecto: Tres jugados, tres ganados y la punta en soledad.
Síntesis:
Brasil: Ederson; Danilo, Marquinhos, Silva, Lodi; Ribeiro, Allan, Douglas Luis; Jesús, Richarlison, Firmino
DT: Tité
Cambios: Paquetá x Douglas Luis; Pedro x Richarlison; Evertón x Jesús
Amonestados: Douglas Luis
Venezuela: Fariñez; Rosales, Osorio, Angel, Feltscher; Moreno, Rincón, Cásseres; Machis, Rondón, Soteldo.
DT: José Peseiro
Cambios: Mago x Feltscher; González x Rosales; Otero x Soteldo; Savarino x Machis
Amonestados: Casseres, Machis, Rondón
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