En medio de la despedida de Trinche Carlovich se incumplieron todos los cuidados que se debe tener por la pandemia que es está viviendo y se vio la cancha de Central Córdoba llena de gente.
Hace unos días se dio la noticia del fallecimiento de “Trinche” Carlovich, que el día miércoles sufrió el asalto de su bicicleta y al momento de quitarle su rodado fue empujado al pavimento. Por desgracia al caer su cabeza pega fuertemente contra el piso y le provocó una herida fatal. Se sabe que el asaltante ya fue aprendido, sobre todo porque al momento del robo dejó su bicicleta vieja para llevarse la de Carlovich, que fue regalada unos meses atrás.
El viernes por la tarde el ex futbolista de Central Córdoba de Rosario dejó de existir en este mundo. Según se pudo averiguar el causante del hecho ya fue detenido y la justicia lo imputará por homicidio.
En el día de ayer se procedió a realizar el cortejo fúnebre de Carlovich, el cual tuvo una gran convocatoria. El “Trinche” fue una figura muy querida en su pueblo, sobre todo porque en toda su vida vivió en la misma casa y esto lo hizo un personaje muy importantes del lugar. Es por esto que durante su despido fue mucha la gente que asistió y la cual se quedó hasta el final de la ceremonia. Pero esto es algo que empezó a preocupar a muchos, ya que se empezó a ver gente que asistía sin sus respectivos barbijos y lo más preocupante es que no se respetaba el distanciamiento social. Recordemos que justamente Rosario es una de las zona más afectadas de Santa Fe, por el momento tuvo 244 afectados por el virus y a pesar de que hace 2 semanas que no aparecen nuevos afectados, el cuidado siguen estando. Pero a pesar de esto un hecho durante el funeral preocupó a muchos santafesinos, mientras que llevaban el cuerpo de Carlovich, el coche fúnebre entró a la cancha de Central Córdoba y ahí es cuando muchos acompañantes entraron al estadio, llenándolo prácticamente.
“Trinche” Carlovich fue uno de los grandes de sus tiempos, muchos jugadores opinan que si el se hubiese dedicado profesionalmente al fútbol seguramente habría llegado a jugar en Europa, pero esto no pudo ser ya que el rosarino simplemente quería jugar a la pelota. Las anécdotas de algunos colegas dicen que al “Trinche” muchas veces tuvieron que ir a despertarlo de la siesta para que vaya a jugar el partido, también que rara vez asistía a los entrenamientos y a pesar de esto en el ambiente futbolístico era uno de los mas elogiados.
En el día de hoy los rosarinos lloran la partida de uno de los mitos del fútbol, que a pesar de no haber jugado en ningún grande, todos en la Argentina sabían que había un integrante de su pueblo que era conocido por su tremendo talento con la pelota.
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