Rosario Central derrotó en Formosa por 2-0 a Belgrano con goles de Marco Ruben y Walter Montoya y es finalista de la Copa Argentina por tercera vez consecutiva. Con gran actuación de Teo Gutiérrez, el Canalla espera ahora al ganador de Gimnasia y River para definir la edición 2016.
El primer tiempo fue parejo e intenso, los del Chacho Coudet intentaban tomar el control del partido pero les costaba generar situaciones claras de gol. Un Teo Gutiérrez enchufado empezó a hacerse cargo de la generación de juego mostrándose siempre, pidiendo la pelota y buscando asociarse con sus compañeros de ataque. Además fue sacando de las casillas a los hombres del Celeste que cayeron en la trampa a tal punto que Farré se fue expulsado cuando se terminaba el primer tiempo por una dura entrada sobre el colombiano.
En el segundo tiempo, Belgrano -ya con diez hombres retrocedió- y apostó todo a una contra. Central se hizo dueño del partido y fue contra el arco de Olave; pudo abrir el marcador pero el palo lo impidió tras un remate de Lo Celso. Pese al dominio territorial y la ventaja numérica le costaba al Canalla encontrar espacios como para traducir esa superioridad en situaciones de gol.
Cuando el Pirata se estaba acomodando en el partido y a Central se le ponía cada vez mas difícil, un rechazo de Gissi encontró mal parado al fondo de Belgrano, Teo no la dio por perdida, la corrió, tiró el centro atrás y Marco Rubén -con el optimismo de los goleadores- estaba ahí para poner la cabeza y abrir el marcador a los 26 minutos.
Jugado por jugado, Madelón tiró a la cancha al Picante Pereyra y Obolo para intentar revertir la historia pero ya era tarde. Aparecieron los espacios y en tiempo de descuento otra vez Teo Gutiérrez, luego de un contraataque perfectamente manejado por el mismo colombiano, asistió a Montoya para que éste deje en el camino a Olave y ponga el 2-0 definitivo.
Central está otra vez en una final de Copa Argentina, será la tercera y quiere que sea la vencida; no pudo con Huracán en el 2014 ni con Boca en el 2015. Tuvo que dejar en el camino a Villa Mitre de Bahía Blanca (1-0), a Rafaela por penales (2-2), a Morón (2-0), a Boca (2-1) y ahora a Belgrano para, al final del camino, encontrarse con Gimnasia o con River e intentar obtener un título que al Canalla se le niega desde hace más de 20 años.
Coudet conduce un equipo que se abraza a la ilusión de devolverle la gloria a la mitad de Rosario; un Rosario que otra vez está cerca.
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Foto principal: Copa Argentina Oficial
