Ferro Carril Oeste volvió a tropezar en Caballito y quedó en una situación cada vez más delicada. El equipo de Sergio Rondina cayó 1-0 frente a San Miguel en el Estadio Arquitecto Ricardo Etcheverri y, con este resultado, quedó a tan solo un punto de la zona de descenso cuando restan únicamente tres fechas para el cierre de la Primera Nacional.
El desarrollo del partido fue tan opaco como preocupante para los locales. Ferro intentó adueñarse de la pelota, mostró voluntad en la búsqueda, pero nunca logró traducir ese dominio en ocasiones claras de gol. El Verde careció de peso ofensivo, de ideas en los últimos metros y volvió a exhibir la falta de eficacia que lo acompaña en esta mala racha. San Miguel, que llegaba en una realidad diferente, tampoco hizo demasiado para imponer condiciones, pero tuvo la virtud de aprovechar la única oportunidad que se le presentó en la primera parte. A los 35 minutos, Bruno Nasta definió con precisión y marcó el único tanto del encuentro, suficiente para sentenciar la historia.
La derrota golpea doblemente. No solo porque Ferro perdió la posibilidad de sumar de a tres en su casa, sino porque la tabla lo empuja hacia un escenario límite. La necesidad de ganar se convierte en urgencia y la presión aumenta con cada tropiezo. El equipo acumula apenas un triunfo en los últimos quince partidos, un dato que explica la crisis y refleja con crudeza el momento que atraviesa.
San Miguel, en cambio, se llevó tres puntos vitales que lo mantienen firme en la lucha por el Reducido y confirmó que sabe capitalizar sus oportunidades aun cuando no es protagonista del juego. Para Ferro, la preocupación se multiplica: el tiempo es corto, los rivales directos acechan y el margen de error ya es mínimo.
El próximo compromiso será de visitante ante Almagro, el sábado a las 15:30. En José Ingenieros, Oeste buscará quebrar la sequía y recuperar aire en un campeonato que lo tiene contra las cuerdas.
Lautaro E. Petroccello
@FerroOficial