Los ucranianos regalaron un tiempo y la “Loba” aullaba mejor. Pero apareció “Chucky” cual muñeco maldito y comenzó la pesadilla para los romanos, que pudieron perder por un margen aún mayor.
Shakhtar Donetsk doblegó 2-1 a Roma en el Oblasny SportKomplex de Metallist y cosechó el quinto triunfo consecutivo en casa en la presente UEFA Champions League. No hay con qué darle al equipo del portugués Paulo Fonseca, que sólo sabe de victorias cuando juega de local (ya lo sufrieron Napoli y Manchester City, entre otros).
Tuvo un mejor arranque la squadra de Eusebio di Francesco, que conectó de la mejor manera a su circuito de ataque conformado por Diego Perotti, Edin Dzeko y Cengiz Under.
El primer aviso del visitante llegó a balón parado. Tiro de esquina de Kolarov desde la izquierda y una peinada de Kevin Strootman en el primer palo. Le quedó a Edin Dzeko a medio metro del arco, pero Andriy Pyatov se mandó una tapa colosal en primera instancia y luego tuvo reflejos para alejar el peligro cuando Federico Fazio se relamía tras el rebote. Un verdadero milagro en el área local.
Más tarde el turco Under hizo de las suyas volcado a la derecha y unos metros en su campo. El joven delantero otomano juntó a 2 rivales y tras un amague sacó un magnífico pelotazo largo para el pique de Diego Perotti. El argentino hizo la pausa y esperó por la llegada de Dzeko, pero al bosnio le salió un tirito muy al medio, fácil para el control del guardavallas ucraniano.
La tercera sí que fue la vencida, porque los capitalinos encontraron la ventaja en el minuto 41. La jugada nació en la izquierda con Kolarov y pase en dirección a Perotti. El argentino ubicó a Dzeko casi en la medialuna y el bosnio le rindió homenaje a Juan Román Riquelme: pausa con la pelota y perfecto pase en cortada que dejó solito y solo al turco Under. La nueva sensación romana pudo con Pyatov – pese al esfuerzo del buen arquero local – estableció el 1-0 parcial. Quinto gol en los últimos 4 juegos para el joven de apenas 20 años, que le aportó frescura al ataque romano.
En el complemento, los locales se encendieron y quien tuvo un gélido desempeño fue el equipo italiano. Un descuido en la defensa posibilitó la levantada ucraniana, que tuvo acento argentino.
A los 52´ un larguísimo pelotazo desde el fondo, cortesía de Yaroslav Rakitskiy, encontró mal parada a la última línea visitante. Facundo Ferreyra picó 1 contra 1 ante la marca de Kostas Manolas y le tiró un delicioso túnel subfluvial para enganchar de la izquierda al centro. Cuando salía al achique Alisson Becker, “Chucky” fue todo un muñerco diabólico y definió bajo el cuerpo del portero brasileño, para nivelar las acciones. Tercer gol en la presente UCL para el ex Banfiel y Vélez Sársfield, que también está con el pie caliente en la liga local porque acumula 15 gritos en 20 partidos.
A partir de ese momento se congeló la Roma y quien tomó las riendas del encuentro fue Shakhtar, con una notable superioridad sobre su adversario. Fred lo hizo correr a Taison por izquierda, quien llegó hasta el fondo y mandó un peligroso centro rasante. Casi en el punto del penal apareció Marlos, que tuvo tiempo de parar la pelota y sacar un disparo de esos que tienen destino de gol. Pero Alisson tuvo una atajada sensacional y evitó la segunda caída de su arco.
Después probó Taison desde afuera del área, con un mazazo que viajaba al ángulo superior izquierdo. Pero otra vez Alisson agigantó su figura, con una elástica volada y posterior manotazo salvador.
Sin embargo, tanto fue el cántaro a la fuente, que al final se rompió. En el minuto 71, Kevin Strootman lo bajó a Marlos a centímetros del área y generó un peligroso tiro libre en favor de los locales. Fred le dio de zurda y combinó potencia con precisión, para clavar la pelota pegada al travesaño y demostrar que Alisson es humano, ya que fue imposible evitar el segundo gol ucraniano. Un poema de remate y merecida ventaja para Shakhtar.
En tiempo adicionado, los locales casi meten el tercero. Un peligroso centro rasante de Fred rebotó en el área chica y dejó a Alisson en el piso y a Bruno Peres en la línea, justo detrás del arquero. Ferreyra se relamía para su eventual doblete y definió de derecha. Pero el increíble acto reflejo de Peres para levantar su botín alcanzó para desviar la pelota de manera impensada. Tremenda salvada de Roma y puede ser uno de esos pequeños detalles que al final se convierten en grandes inyecciones anímicas para seguir con vida.
Llave con pronóstico reservado porque hubo un tiempo para cada uno y quedó apenas 1 gol de diferencia. La ciudad eterna los espera recién el 13 de marzo. Sí, son demasiados días para calmar la locura futbolera que produce la UCL. Es que el Imperio no se construyó en un solo día: sean pacientes… Roma, a cuerdos y locos doma.
(Foto: RTVE.es)
