Triplete del portugués para torcer la historia y superar un duro escollo en el camino europeo. CR7 ya suma 124 goles continentales y es una verdadera LEYENDA del fútbol mundial.
Juventus goleó 3-0 a Atlético Madrid en el Allianz Stadium de Turín y levantó el 0-2 sufrido en el que será el escenario de la final de la UEFA Champions League. Otra noche histórica (y van) de Cristiano Ronaldo, quien imprimió factura por triplicado y terminó con el sueño “colchonero”.
Tanto se habló del convincente triunfo del “Aleti” en el primer chico, donde el equipo de Diego Simeone maniató a la “Vecchia Signora” y le impuso su sello de autoridad. La levantada sonaba a una película de tinte épico y solamente una persona desbordaba confianza … un tal Cristiano Ronaldo.
Sí, acusado de arrogante con una frase llena de pedantería, el portugués se animó a declarar que “la Juventus iba a levantar la serie gracias a un triplete suyo”. Creer o reventar: el luso de 34 años, quizás en edad de buscar un nuevo desafío en una liga menor, no solamente aceptó el reto de llevar su estirpe ganadora a un país tan exigente como Italia. Sino que además, lo hizo en un nivel superlativo y con las ambiciones de cosechar títulos aún intactas.
Una desdibujada versión de lo que suele mostrar un equipo marca Simeone. Atlético Madrid ni por asomo fue el que superó en vehemencia, juego y contundencia a los italianos. Apenas una sombra llena de tibieza y sin reacción.
Ya a los 3 minutos el local impuso condiciones y le hizo sentir el rigor a los ibéricos. Giorgio Chiellini recogió una pelota suelta dentro del área chica y sacudió la red de Jan Oblak, pero el árbitro holandés Kuipers anuló la conquista por una falta de Cristiano sobre el portero esloveno.
Recién a los 26´ llegó el tan ansiado primer gol para el heptacampeón italiano. Bola cruzada desde la izquierda por parte de Federico Bernardeschi y notable salto de Cristiano Ronaldo para ganarle la posición a Juanfrán y cabecear al fondo de las mallas.
Apenas iniciado el complemento, Juventus volvió a golpear y otra vez con su arma más mortífera. Pelota de lado a lado con buena circulación y Joao Cancelo quedó en la banda derecha en posición de enviar un centro. Otra vez ganó en las alturas CR7 y metió un cabezazo fantástico. La atajada de Oblak fue colosal, con una estirada de antología. Sin embargo, el esfuerzo del esloveno no alcanzó, ya que la tecnología indicó enseguida que la pelota había traspasado la línea de gol. Todo como al principio y Turín era un caldera.
Y el desenlace inevitable llegó a 5 minutos del final. Presagiaban una batalla en tiempo extra, pero ese distinto de Bernardeschi se encargó de generar una situación propicia de gol. El extremo nacido en Carrara recorrió 40 metros con la pelota atada y no se la sacaban ni con un mármol. Ángel Correa lo persiguió durante todo el trayecto, pero cometió el pecado de ese delantero que no sabe marcar: infantil infracción dentro del área y penal para Juventus.
Eso que Cristiano creyó hace 15 días estaba a 11 metros de distancia. Pura confianza para tomar la redonda y ubicarla en el manchón de los 12 pasos. Furibundo derechazo a un costado y Oblak que fue hacia el otro, para desatar el delirio juventino. Con la realiza de Víctor Manuel II y la prosa de Carlo Levi … Cristiano Ronaldo hizo abdicar al mismísimo rey de Piamonte y escribió la mejor historia europea jamás contada.
Juventus tiene la moral por las nubes y ésta remontada lo transforma en el candidato número uno a levantar la orejona. Claro que falta mucho y que habrá equipos más duros enfrente. Pero salir airoso de una batalla que parecía perdida, fortalece a cualquiera. Más aún, si su principal estandarte responde con goles y noches mágicas. Cristiano es el talismán que suele dejar al “Viejo Continente” a sus pies.
Síntesis:
Juventus (3): Szczesny; Joao Cancelo, Bonucci, Chiellini y Spinazzola (Dybala); Emre Can, Matuidi y Pjanic; Bernardeschi, Mandzukic (Kean)y Cristiano Ronaldo. DT: Massimiliano Allegri.
Atlético Madrid (0): Oblak; S. Arias (Vitolo), Godín, J.M. Giménez y Juanfrán; Koke, Rodri, Saúl y Lemar (A. Correa); Griezmann y Morata. DT: Diego Simeone.
Árbitro: Bjorn Kuipers.
(Foto Principal: Black And White Lovers)
