El “Nerazzurro” no lo supo sostener y se quedó con las manos vacías en su propia casa. Atalanta sigue de racha, Napoli de fiesta y a los genoveses les volvió el alma al cuerpo.
Inter lo dejó escapar y perdió un partido increíble. En el Giuseppe Meazza, el “Nerazzurro” ganaba 1-0 y terminó cayendo 2-1 ante Bologna.
Peligra el tercer puesto para la squadra de Antonio Conte y la chance de arrimarse al líder se escurrió como agua entre las manos (11 puntos abajo con 24 por jugar).
Era todo risas porque a los 22´ comenzó la locura para el dueño de casa. Centro de Ashley Young desde la izquierda y cabezazo de Lautaro Martínez al palo. Rebote para Romelu Lukaku y el belga fue implacable para señalar el 1-0.
Apenas iniciado el complemento, los “Felsinei” tuvieron 5 minutos fatales, en los que bien pudieron recibir el tiro de gracia. A los 57´se fue expulsado Roberto Soriano por un patadón sobre su tocayo Gagliardini y en el minuto 62 Danilo le cometió un zonzo penal a Antonio Candreva. Lautaro con la ejecución y Lukasz Skorpuski detuvo no solo el remate sino que también evitó la caída de su arco en el rebote que le quedó a Gagliardini. Tremenda reacción del guardavallas polaco.
Entonces Inter se quedó dormido y Bologna aprovechó que lo dejasen con vida. A los 74´, Musa Juwara aprovechó una grosera pifia de Gagliardini y encontró una pelota suelta afuera del área y ajustició al bueno de Samir Handanovic.
El local perdió la compostura y emparejó la cantidad de jugadores en el campo porque Andrea Bastoni fue pintado de amarillo por segunda vez, a los 77´. Y 3 minutos más tarde Musa Barrow – otro gambiano – metió el aguijón con un tremendo zurdazo luego de un gran pase de Nicolás Domínguez.
Atalanta sacó pecho y se volvió victoriosa de la isla. En su visita al Sardegna Arena, la “Dea” derrotó 1-0 a Cagliari y sumó su octavo triunfo consecutivo.
No fue con el brillo de siempre ni por goleada, pero sí hubo una clara superioridad por parte del equipo que entrena Gian Piero Gasperini, ante unos sardos que decididamente naufragan en la mediocridad.
El único gol del encuentro llegó desde el punto del penal, en el minuto 27. Un largo pelotazo desde el propio campo en dirección a Ruslan Malinowsky encontró al ucraniano en franca posición del gol. Infantil empujón de Andrea Carboni dentro del área y pena máxima decretada por Federico La Penna (además de amonestar por segunda vez al defensor italiano). Luis Muriel lo transformó en gol y así consiguió el solitario tanto de la victoria.
Napoli tuvo su fiesta completa y batió 2-1 a Roma en el San Paolo. A 36 años del debut de un tal Diego Maradona en la ciudad de San Gennaro (el resto es historia), los “Azzurri” no solo vivieron del recuerdo sino que también proyectaron su futuro europeo.
A los 55´, una bola cruzada de Mario Rui desde la izquierda tuvo el genial anticipo de José María Callejón entre los 2 centrales, para abrir el marcador.
Rápidamente emparejó las acciones la “Loba” con un aullido que vino desde el Monte Ararat. Toda de Henrik Mkhitaryan por el centro y remate que se coló junto al vertical de la mano derecha del arco defendido por Alex Meret.
Hasta que el sello de calidad lo imprimió ese petiso que juega fenómeno. Minuto 82 y una genialidad de Lorenzo Insigne le devolvió la ventaja a Napoli. Regate corto dentro del área en el sector izquierdo y disparo marca registrada que viajó rumbo al ángulo superior zurdo (parecido al de Alejandro Montenegro a Hugo Gatti en un superclásico de 1985).
A Sampdoria le alcanzó con un tiempo y goleó 3-0 a SPAL en el Luigi Ferraris. Vital éxito para los genoveses ante un rival directo, para despegarse 7 puntos de la zona candente.
Karol Linetty inauguró el marcador a los 11´, con un remate de zurda desde afuera del área. Manolo Gabbiadini estiró la distancia con un tiro libre a los 45´ y Linetty con una réplica letal selló su doblete en el tercer minuto de tiempo agregado.
Brescia volvió a encender la llama de la esperanza al imponerse 2-0 sobre Hellas Verona, en el Stadio Mario Rigamonti. Los lombardos abandonaron el último puesto de la tabla y se ilusionan con la permanencia.
Andrea Papetti hizo vibrar a la afición con un cabezazo a los 52´, luego de un córner ejecutado por Sandro Tonalli. Y la tranquilidad para los del uruguayo Diego López llegó en el sexto minuto adicional, cortesía de Alfredo Donnarumma.
En un partido signado por los penales, Fiorentina el bajó al “Pulgar” a Parma al derrotarlo 2-1 en el Ennio Tardini. Tercera caída en fila para los “Cruzados”, que pasaron de ser la revelación a un equipo lleno de dudas.
A los 19´, Riccardo Gagliolo lo derribó a Lorenzo Venuti dentro del área y pena máxima para el visitante. Erick Pulgar con su habitual precisión puso el 1-0.
Parma no aprendió la lección y a los 31´ cometió otro penal. Mano de Matteo Darmian en la 18 local y nuevo penal que otra vez el chileno Pulgar transformó en gol.
Devolución de gentileza por parte de la squadra viola – hoy vestida de azul – con un codazo de Germán Pezzella sobre Juraj Kucka y penal que el propio eslovaco cambió por (vana) esperanza en el minuto 50.
Genoa salvó la ropa con un agónico grito en el minuto 97, para igualar 2-2 con Udinese en su excursión al Dacia Arena del Friuli. Perdían 2-0 los “Grifoni” y sentían el calor del infierno, pero 2 postreros tantos alcanzaron para llevarse un punto de oro que cotiza en lo anímico.
Seko Fofana le dijo que sí con la cabeza a un centro de Rodrigo De Paul y quebró el cero a los 44´. Minuto 73 y un furibundo zurdazo de Kevin Lasagna infló la red del arco de Mattia Perin y perfumó de aroma a “partido liquidado”.
Sin embargo, Genoa volvió a la vida con el descuento del inoxidable de siempre. Patriada de Goran Pandev por el medio y remate esquinado que dejó sin recursos a Juan Musso, en el minuto 81.
El reloj marcaba 97´ y se vivieron escenas de dramatismo en el área local. Una pelota al área fue disputada por Marvin Zeegelaar y Davide Biraschi y el italiano cayó al piso víctima de un patadón. El árbitro Daniel Orsato – a instancias del VAR – confirmó que el neerlandés lo sacudió a su rival y señaló el manchón de los 11 metros. Si algo más le faltaba a esta contienda no apta para cardíacos era que Muso le atajase el disparo a Andrea Pinamonti … pero hubo final feliz para el visitante porque el propio ejecutor se hizo del rebote y en segunda instancia desató el delirio genovés.
(Foto Principal: Marca Claro Argentina)
