CHAMPIONS LEAGUE
Grupo H
La “Vecchia Signora” no precisó una actuación superlativa para quedarse con los tres puntos ante el debutante Young Boys de Suiza. Paulo Dybala fue la gran figurando marcando su primer hat-trick en Champions.
Sin Cristiano Ronaldo entre sus filas, ya que el portugués debía cumplir con la fecha de suspensión por su expulsión en el debut del certamen frente a Valencia, Juventus consiguió un triunfo que lo deposita en la punta del grupo, a la espera de lo que suceda más tarde cuando justamente el elenco español visite Old Trafford para batirse a duelo con el siempre complicado Manchester United.
No fue una aplanadora, no le hizo falta: “La Juve” fue certera, concreta, precisa y golpeó en las más claras ocasiones que se le presentaron. Desde los pies de Leonardo Bonucci salió la asistencia que capturó Paulo Dybala, para poner en ventaja a la escuadra italiana cuando apenas se habían jugado cinco minutos. Fue una maravilla de pase, prácticamente desde el círculo central partió un balón que Dybala logró encontrar en las cercanías del área chica del golero suizo David Von Ballmoos. El cordobés sólo necesitó calcular y su exactitud transformó la asistencia de Bonucci en un golazo que, además de abrir el marcador, le permitió a Juventus manejar los hilos de un partido que, de todas maneras, fue parejo en el desarrollo durante los 90 minutos que se disputaron.
Young Boys, debutante en el torneo a nivel clubes más importante del mundo, no se amilanó ni con la camiseta rival, ni con el imponente estadio ni con la desventaja; jugó con criterio y prolijidad, no permitió que el elenco de Massimiliano Allegri lo avasallara e intentó igualar circunstancias, aunque claramente la diferencia de jerarquías desde los nombres, se notó y una más que ninguna otra: realmente Paulo Dybala consiguió su jornada de sueños en Champions League. A los 33 de ese primer tiempo, el pibe de Cañada Larga tuvo la rapidez de ir a buscar un rebote tras un fuerte disparo de Blaise Matuidi y, cambiándosela de palo al guardameta rival, estampó el segundo de su equipo y suyo propio. “Juventus Stadium” deliraba, CR7 celebraba desde el palco y la afición juvetina se rendía a los pies del ex Instituto de Córdoba.
2 a 0 se fueron al descanso y al regreso, la dinámica no se modificó; Young Boys intentó sin lograr y Juventus marcó los tiempos y el camino. Pero la figura de la tarde italiana quería más, quería otro y casi lo obtiene apenas arrancado el complemento: una gran habilitación de Federico Bernardeschi dejó a Dybala cara a cara con Von Ballmoos, pero el zurdo le pegó con derecha y su disparo dio en el palo. Sin embargo, a los 14 de la segunda etapa, llegó el tan ansiado tercer tanto: de pesquero, dentro del área chica, empujó al arco una pelota que había enviado Juan Guillermo Cuadrado y a cobrar.
Quizás el duelo en sí mismo no fue demasiado vertiginoso, propios y ajenos entendían cómo plantarse y la escuadra suiza comprendía que se encontraba en desigualdad jerárquica, por lo que se plantó de manera que la superioridad de Juventus no se tradujera en una goleada apabullante: coordinación atrás, pases largos y, tal vez, algún atacante pudiera aprovecharse de un descuido en el área local; esa era la estrategia, esa era la esperanza. Ya con el duelo 3 a 0 a favor, Allegri sacó a Miralem Pjanić y a Mario Mandžukić, ingresando Sami Khedira y Moise Kean a los 15 y 32 del complemento respectivamente y retiró el pie del acelerador. Matuidi había sido reemplazado en el entretiempo por Emre Can y con la idea de manejar siempre el balón, dedicó los minutos restantes a controlar las insinuaciones de los suizos.
No pasó mucho más que eso, excepto por una falta de Mohamed Camara que le valió la segunda tarjeta amarilla, por lo que salió expulsado a los 32 minutos del complemento.
Fue toda alegría para Juventus y para Dybala: la gran estrella de la noche del Juventus Stadium de Turín.
DETALLES DEL PARTIDO
FOTO DESTACADA: “Paulo Dybala”
@cholito82, cuenta oficial de Twitter de Hernán Laurino
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