Almirón está contra las cuerdas. La derrota ante Boca pegó duro y el partido del miércoles ante Junior es determinante. Al DT se lo vio golpeado y hay dudas sobre su continuidad. Son 15 partidos sin triunfos.
Había una leve esperanza basada en la paternidad sobre Boca, aunque el presente no daba muchos motivos para ilusionarse con que San Lorenzo se retiró victorioso de la Bombonera. Pero tampoco nadie esperaba una actuación como la de noche. El golpe fue duro y sacudió al Ciclón.
La cara de Almirón al abandonar el Alberto J. Armando lo decía todo. Se lo noto abatido y perdido. Y el hecho de que no efectuará declaraciones fue una clara señal de su estado de ánimo. Previamente había mantenido una reunión con Matías Lammens donde se acordó seguir…por ahora.
Anoche no hubo nada positivo para rescatar. Fue derrota y por goleada. Con un rendimiento futbolístico muy pobre y sobretodo, sin actitud. El Cuervo nunca mostró rebeldía ni empuje. Parecía un equipo entregado. ¿Los jugadores del CASLA están convencidos aún del discurso e ideas de Almirón?.
Y además, los rendimientos individuales no ayudan. No hubo ningún jugador que aprobase el examen ante Boca. Y para colmo, los refuerzos de Almirón, como Monetti, “su” arquero, no ayudan, al contrario.
Los de Boedo continúan últimos en la Superliga. Son 15 partidos sin victorias, y en caso de no ganar ante Junior, serán 16, igualando la peor racha de la institución,que data del Metropolitano 76.
De local, con la obligación de ganar mas que nunca y quizas, sin importar como. Así sera la noche del miércoles para Almirón y compañía. Con la guillotina en el cuello. El panorama es claro: por más respaldo que reciba de Lammens y Tinelli, nadie puede asegurar que, en caso de no quedarse con los tres puntos, Almirón siga en su cargo.
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