Olimpo vivó ayer una noche inolvidable y lejos estuvo de ser por un mérito deportivo. En la sede social, la Comisión Directiva lanzó oficialmente la campaña de socios que busca sumar adherentes de todo el país. Tambaleando en el fútbol y complicado en lo económico, las risas y los festejos cambiaron la cara de la institución.
Rodeado de viejas glorias como el goleador Raúl Schmidt, Manuel Cheiles y José Ramón Palacio, ex jugador y padre de Rodrigo, la actual conducción aurinegra dio paso a la tan esperada convocatoria a asociarse. Junto con autoridades municipales y provinciales, centenares de hinchas se reunieron en el Salón Bariloche para tratar de hablar de algo más que fútbol.
Es que el presente de Olimpo en la Superliga no es bueno y parece condenado al descenso. Pero como pocas veces, el proyecto parece apuntar a largo plazo. Las deudas contraídas por la anterior gestión son el principal déficit a atacar y el Presidente Mauro Altieri llamó a convocar a todos los que en algún momento, y por diferentes situaciones, se habían alejado.
Hoy la cantidad de socios no supera la tribuna popular más importante. Ni hablar si se le suma la cabecera de Ángel Brunel (donde suele ubicarse la barra) y el sector de plateas. Y con los elevados costos de un plantel profesional que compite en la máxima categoría del fútbol argentino, el proceso se hace inviable. Más allá de eso, la principal característica de la campaña de la lista vencedora (y opositora) en las últimas elecciones fue “recuperar la identidad aurinegra”, algo que pareciera estar en marcha.
Entre cánticos de la barra que se apostó en los balcones del salón, y luego de un emotivo video de Rodrigo Palacio que se aprovechó para homenajear a su padre, Altieri recalcó la necesidad de contar con una masa societaria más abultada, a la vez que anunció el sorteo de un auto 0 KM (que puede observarse en la puerta de ingreso a la sede) cuando el número llegue a 8000 (hoy está cerca de los 5000).
Así, se inicia una etapa que, se espera, sea fructífera. Porque es sabido que el equipo puede ir y venir en las divisionales más importantes y las caras pueden cambiar; técnicos, jugadores y dirigentes. Pero el club es y seguirá siendo de los socios. Y así lo ha dejado claro Olimpo.
Foto: La Nueva
