Puerto Nuevo es uno de los equipos que participa del campeonato de ascenso denominado Primera B, y tiene en sus filas a Marina González, quien muy amablemente accedió al contacto con el Rincón del Fútbol desde su Campana natal.
Primeramente, mencionó los objetivos que tiene el Portuario en el corto plazo:
“Estamos mentalizadas en pelear el ascenso, sabemos que es difícil, pero al menos pelear en el reducido”.
También nos brindó detalles sobre la modalidad de entrenamiento que vienen llevando a cabo junto con sus compañeras, siendo muy a pulmón en varios lapsos de la semana:
“Entrenamos todos los días, a veces por nuestra cuenta y tres veces por semana en el club”.
Además, remarcó la unidad todo el plantel, que tiene una particularidad de color en el ámbito familiar, por el hecho de compartir cancha y equipo con su hermana y prima:
“El equipo como verás es muy unido, imaginate que somos casi todas de Campana y muchas son amigas. Está mi hermana Marisa y mi prima Nancy”.
Esta es una más que destacada anécdota de todo los componentes del fútbol femenino de Puerto, conjunto situado en la novena posición, con 24 puntos cosechados hasta el momento, tras haber logrado siete triunfos, tres empates y nueve derrotas.
El humilde conjunto, que tiene a su equipo masculino formando parte de la Primera D, apuesta a meterse en el torneo reducido en lo que respecta a las chicas, y hoy en día está ingresando a dicha instancia.
“María Rodríguez juega de central junto con su hija que se desempeña como cuatro”, explicaba Marina, quien también tuvo un paso por Villa San Carlos en la temporada 2016/17, más precisamente en Primera A.
Luego llegó el turno de repasar la actualidad de Puerto con sus resultados recientes en el actual torneo de la Primera B 2017/18 organizado por AFA:
“Perdimos el sábado contra Defensa y Justicia 1-0 y este domingo jugamos contra el rojo (Independiente) de local”.
Con respecto a su paso por las Villeras, no dudó en remarcar que extraña tanto a las jugadoras como al cuerpo técnico:
“Extraño mucho a todas/os, me re encariñe” (Risas).
Cabe destacar que la jugadora se trasladaba desde Campana hacia La Plata tres veces por semana, para llevar a cabo los entrenamientos diarios, siendo una linda anécdota realizada en base a mucho sacrificio y esfuerzo.
Foto: Gentileza – Marina González
