En el Rincón del Fútbol te contamos la historia de las jugadoras más destacadas que participarán en Francia 2019. En esta oportunidad: La capitana del combinado Kiwi.
Alexandra Riley nació el 30 de octubre de 1987 en la ciudad de Los Ángeles, Estados Unidos, y representa al seleccionado neozelandés de fútbol.
Ali, como la llaman popularmente, comenzó su carrera futbolística en la escuela parroquial St. Matthew’s situada en Pacific Palisades y luego en el colegio Harvard-Westlake, en North Hollywood. En aquella estadía, fue seleccionada como la capitana del equipo y fue nombrada dos veces como la MVP ofensiva de la Liga de la Misión. En su último año como estudiante, alcanzó la final de la División I de la sección sur con las Wolverines y fue nombrada jugadora del campeonato. A su vez, también compitió para dos clubes locales: LA Breakers FC y el Real Socar.
Una vez finalizada su enseñanza de segundo nivel, Riley asistió a la Universidad de Stanford y representó a su equipo femenino de fútbol durante el periodo de 2006/2009. Allí, en su primer año, disputó un total de dieciocho encuentros, anotó cuatro goles y brindó dos asistencias. En el segundo año, el número de partidos jugados disminuyó a dos, al igual que los tantos convertidos. A lo largo del 2008, la estadounidense cambió su ubicación en el terreno de juego y se transformó en lateral. Ya en su último año, participó de veinticuatro juegos y consiguió anotar un gol.
En enero de 2010, Ali fue contratada por el FC Gold Pride y se desempeñó como lateral por izquierda a lo largo de toda la temporada. Debido a su gran performance, la WPS la premió con el título de Novata del año de la Women’s Professional Soccer. Un año más tarde, debido a la crisis económica del club, Riley quedó libre y firmó para el Western New York Flash, donde conseguiría el título de la WPS.
Tras hacerse con el campeonato de la liga estadounidense, Alexandra volvió a firmar con el Flash pero la institución debió dejarla libre por la suspensión de la WPS. De esta manera, nuevamente como jugadora libre, Riley emigró al fútbol sueco y llegó al Malmö, quien luego cambió su nombre a FC Rosengård. En dicho club, como futbolista de Los Ángeles se desempeñó por seis temporadas, donde consiguió títulos de la liga y la supercopa de Suecia.
Luego de un gran desempeño en el país nórdico, en julio de 2018 el Chelsea FC Women anunció la contratación de Riley para afrontar el campeonato inglés (FA WLS).
SELECCIÓN
Debido que su padre nació en Nueva Zelanda, Riley fue convocada a la selección neozelandesa para disputar el Mundial Sub 20 del año 2006. Sin embargo, la citación al combinado mayor no se hizo esperar, ya que tan sólo un año después Ali participó de un amistoso internacional frente a Australia en febrero del 2007. Aquel mismo año, la estadounidense disputó el Mundial Femenino de China 2007, donde las Kiwis cayeron en sus tres presentaciones.
Un año más tarde, Riley participó de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, consiguiendo tan sólo un punto en la fase de grupos en el empate 2-2 frente a Japón. Dos años después, llegó la primera anotación de la lateral derecha con la camiseta kiwi, el mismo fue en el duelo ante Papúa Guinea en la final de la Copa de las Naciones Femeninas de la OFC.
En 2011 participó de la Copa Mundial Femenina celebrada en Alemania. En aquella oportunidad, Ali lograría, junto a sus compañeras, un hecho histórico: empatar ante México 2-2 y cosechar el primer punto para Nueva Zelanda en el certamen internacional femenino. Luego, también participó en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, en el Mundial de Canadá 2015 y en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. A partir del 2017, Ali fue nombrada la capitana de las Kiwis y consiguió su primer título con la cinta en la Copa de las Naciones Femeninas de la OFC 2018.
Foto: FIFA.
