Todavía se sentía la tristeza tras la derrota de Argentina ante España en la final del Mundial de Básquet. En Madryn, una ciudad donde la pelota naranja tiene más adeptos que el fútbol, eran las 11 y había un partido por disputar. Dadas las circunstancias, horario de poca adhesión y eso se notó en el Raúl Conti. Aún así, Guillermo Brown e Independiente Rivadavia se encontraban por la quinta fecha de la Primera Nacional. Ambos venían de ganar en la jornada anterior y querían ir por un nuevo triunfo.
Los madrynenses se sacaron la mufa de 3 caídas al hilo con una gran victoria ante Platense en Vicente López en tiempo de descuento. Los mendocinos golearon a Chicago de la misma manera que lo habían hecho en el Reducido del año pasado: 4 a 1. De ese modo llegaban a Madryn con 2 victorias de local y 2 derrotas de visitante.
Hubo un sólo protagonista en el partido: el conjunto local. Más allá de momentos de disputa y cierto espíritu trabado, La Banda fue el único que intentó y generó las oportunidades más claras en la primera mitad. Sin embargo, al descanso se irían 0 a 0.
En la segunda parte la tónica seguiría de modo similar, aunque los visitantes comenzaron a arrimarse un poco más. Tanto Broggi como Theiler – ex DT de Brown, ahora en Independiente Rivadavia – empezaron a mover el banco. Entre los 9 y los 31 se realizaron 5 de los 6 cambios: en el local los 3, dos de ellos bien ofensivos y en el visitante 2. Los locales querían sumar de 3 por primera vez en casa, mientras que La Lepra se conformaba con un puntito, que también era una primera vez, pero en su caso de visitante.
Y cuando el mediodía primaveral ya se asomaba, y el partido se cerraba, apareció la única emoción del encuentro: centro desde la izquierda, dudas en la defensa mendocina y Mateo Acosta metió el piecito para desatar el festejo madrynense. Iban 40 minutos del segundo tiempo. Los visitantes tendrían un tiro libre peligrosísimo sobre el final pero pasó cerca del palo derecho de Taborda.
Los locales se quedaron con una victoria muy preciada, la segunda de forma consecutiva y la primera en casa. Otra vez en los últimos minutos surgió un plus para ganar el partido. Sale del fondo y se acomoda ahí en mitad de tabla con 6 unidades. En el mismo lugar queda el conjunto de Mendoza, que en todas sus visitas se fue con las manos vacías.
En la próxima, los patagónicos visitarán Villa Crespo para jugar ante un encumbrado Atlanta, mientras que La Lepra tratará de hacer pesar su localía ante Alvarado.
Imagen destacada: Diario La Jornada
