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#GranDT: El maestro cordobés

El Viejo. Timo. Carlos Griguol. El mejor entrenador de la historia de Gimnasia. Una bisagra en el fútbol del club. Y mucho más que un DT. “El técnico que por decisión unánime eligió la Comisión Directiva de Gimnasia es el señor Carlos Timoteo Griguol”, dijo el presidente Héctor Delmar una noche de octubre del ’94 y cambió la vida para el triperío.

Maestro. Faro. Un adelantado. El mejor, sin dudas. Viejo desde joven, llegó al Lobo tras haber llevado a un pedestal inimaginable a Ferro. En Oeste construyó un equipazo ninguneado por la cátedra, cuestionado por la mecanización de movimientos, ni más ni menos que el trabajo al servicio del talento. Fue bicampeón ’82 y ‘84. Timoteo traía 40 años de fútbol, desde sus inicios como centrehalf de Atlanta. Jugó en Central, donde también fue campeón como DT en el ’73. Sabía todo. Por eso, miraba a un jugador y sabía si servía o no o le corregía detalles que se le habían escapado a entrenadores de juveniles. Enseñaba. Hacía docencia. Y aprendía, siempre atento a los cambios. Mejoraba a todos a su alrededor.

Gracias a Carlos Timoteo Griguol, Gimnasia tuvo su gran era moderna, la segunda de su rica historia. Hacedor de equipos inolvidables. Hacedor de hombres. En su etapa tripera, trabajó con su primo Mario Griguol, sus yernos Gabriel Perrone y Víctor Hugo Marchesini y el profe Javier Valdecantos. “Ahora le buscan palabras difíciles: coaching, neurociencias, pases entre líneas, extremos, laterales en ataque, etc…Él  ya sabía todo y nos lo enseñaba”, recuerda Marchesini, jugador suyo en Ferro. Timoteo era un adelantado.  A Gabriel Perrone lo tuvo en River y lo llevó a Ferro en su segunda etapa como entrenador. “Hablábamos mucho de fútbol , me gustaba y me buscaba para charlar. En el ’95 dejé el fútbol para trabajar con él” . Valdecantos, hoy en Boca con los mellizos (otra herencia griguoliana) lo recuerda como “el mejor técnico con el que trabajé. Inolvidable. Un maestro en todo sentido”.

En su partido homenaje en el Bosque.

Tan avanzado era en su concepción, que de sus charlas con León Najnudel, entrenador de básquet de Ferro (e impulsor de la Liga Nacional) sacó las cortinas que enloquecieron en los corners a los rivales. El trabajo daba frutos. Siempre. En el ’96 impuso el doble pivot en la mitad de la cancha, marca registrada del Ajax holandés de esos tiempos. Sin embargo, era simple para explicar. Cero complejidad. “El Viejo era un sabio. Te preparaba para estar fuerte y te decía dos cosas, si no las entendías, afuera. Para mí fue un genio. Un padre”, recuerda Beto Márcico desde el agradecimiento a quien le abrió las puertas en el amanecer (sin inferiores, debutó en primera en el ’80) y en el ocaso de su carrera.

“Las inferiores son todo. Ahí es donde los clubes deben invertir”, era el padrenuestro de Timo. Por eso, en Estancia Chica encontró un paraíso, campo fértil para que las semillas (los pibes) germinaran. Abasto fue clave en aquella decisión, decirle sí a Gimnasia en el ’94. “No había dado el ok. ‘Déjenme ver las instalaciones, si no conozco el lugar no sé si puedo trabajar’, pensé. Cuando vi todas las posibilidades que brinda Estancia Chica, dije sí”. El predio fue “su lugar”, donde encontraba relax pasando ratos largos arriba del tractorcito. No era raro verlo cortar el césped o acercándoles facturas a los juveniles antes de las prácticas. El sponsor de “Fideos Manera” que lucía en su gorra garantizó la provisión de fideos, arroz y agua mineral para la pensión. Hasta un tractor consiguió con ese canje. También semillas y fertilizantes para los campos de juego, su obsesión. “Íbamos a dar charlas a Campana porque era padrino del equipo de Siderca y nos donaban los alambrados”, recuerda Perrone sobre aquella Estancia Chica mejorada a pulmón.

Griguol siempre estuvo lejos de esa distancia que por su edad parecía marcar con el jugador.  “En la intimidad no tiene nada que ver con la imagen hacia afuera. Jodón, generaba buenos climas.  Nunca dejaba pagar nada al otro”, dice Marchesini. Un tipo ultrageneroso con los otros técnicos. Con criterios amplios , fue un DT “moderno” hasta su retiro. Para Gabriel Perrone “trabajar con el era un orgullo. Aprendí sobre todo a respetar la profesión. Es de los grandes DT que dio nuestro fútbol con principios y códigos que muy pocos tienen”

El legado del Maestro –como lo validó el mundo del fútbol desde sus tiempos en Gimnasia- fue mucho más allá de lo organizativo. Los consejos a los futbolistas eran ayudar a los padres, pensar en la familia, la casa antes que el auto. Ahorrar la plata porque el fútbol no es para siempre. Estudiar, hacer algo en las horas libres que sirva para ser mejor. Así, son recordados los retos al Negro Saccone cuando chocó con su Clío Williams, aquel examen que Fernandso Gatti no pudo rendir y le valió salir del equipo el domingo y aquel consejo a Lea Cufré: “No vayas a Vélez, esperá”. Una semana después, viajó para sumarse a Roma.

Fue subcampeón en 1995 con un equipo pragmático, con Guillermo Barros Schelotto como figura excluyente. Un año después, armó un ballet con Márcico, Albornoz y los mellizos juntos. Otro subcampeonato, ahora con un fútbol brillante: goleadas a Boca y a Racing 6 a 0. Y en el ’98, el tiempo de la dinámica europea con los centros de Guly para los goles del Pampa Sosa, para salir tercero en el Clausura y segundo otra vez en el Apertura. Se fue a Betis en el ’99 y volvió al año. Su tercer ciclo fue en la temporada 2003-2004. Ya no fue lo mismo y no dirigió más. Su esposa Betty, sus hijas, sus familias y el fútbol, siempre el fútbol, son su vida. Aún hoy, cuando sus recuerdos se han vuelto pálidos a los 85 años

Facundo Bernardo Aché

Soy Facundo Aché, 50 años, desde hace 31 años cubriendo fútbol. Con pasos por AM Rocha, Radio Universidad y Belgrano, hace 22 años que trabajo en FM La Redonda, la radio de deportes de la ciudad de La Plata. Tres años cubrí el día a día de Estudiantes (2002-2004) pero antes y después cubrí -y cubro- la información de Gimnasia y Esgrima La Plata, tanto para la radio como para el Blog Tripero del Diario El Día. Además, colaboré en la redacción de Decano De América, la historia de Gimnasia en su 130 aniversario. Así que desde 1992 vinculado al "Lobo", ahora el desafío es brindarles la mejor información desde este espacio llamado El Rincón del Fútbol.

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2 Comentarios

  1. Diego dice:

    El maestro cordobés!!! Tengo 38 años viví la mejor época de gelp si dudas. Lastima que no aprendimos nada.Es por ahí gimnasia!!!!

  2. Matías benito dice:

    IDOLO y MAESTRO.
    Épocas de gloria que es necesario defender y resaltar. No hubo otro como Griguol. Hay que seguir el legado. Gente que quiera al club, que laburen por y para el club con pasión y compromiso.
    Qué época 👏👏👏👏 hermosa nota facu

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