El torneo de selecciones más importante de la Confederación Norte, Centro y Caribe llega a su fin. En Santa Clara, cerca de esas “Calles de San Francisco” que solían recorrer Karl Malden y Michael Douglas en los 70´s en la afamada serie televisiva, Estados Unidos y Jamaica decidirán quién es el campeón de la XIV edición de la Copa de Oro.
Todos esperaban al anfitrión en el encuentro decisivo, pero se sumó a la fiesta un invitado sorpresa. Es que los “Reggae Boyz” dejaron en el camino a México y desataron una verdadera tragedia nacional azteca. Los caribeños jugarán la segunda final de su historia (hace 2 años cayeron 3-1 precisamente frente al “Tri” y en Filadelfia). Por su parte, los “Yankees” van por su undécima definición, que los tiene con la misma cantidad de alegrías y sinsabores: 5 títulos (1991, 2002, 2005, 2007 y 2013) y 5 subcampeonatos (1989, 1993, 1998, 2009 y 2011).
Estados Unidos está arriba 3-1 en el historial de la competición. En el Grupo A de la edición 1991 se impuso 1-0 en Dallas por anotación de Eric Wynalda. Recién volvieron a verse las caras en 2005, por los cuartos de final: allí también sonrió el local en Foxborough con un triunfo 3-1, gracias a un doblete de DaMarcus Beasley y un tanto de Josh Wolff (Ricardo Fuller descontó para los jamaiquinos).
La tercera victoria estadounidense llegó en 2011 y también en la instancia de cuartos de final. Fue 2-0 en Washington, cortesía de Jermaine Jones y Clint Dempsey. Sin embargo, hubo un impacto caribeño hace 2 años, porque los “Reggae Boyz” sorprendieron en semifinales con un inolvidable 2-1 en Atlanta, gracias a los goles de Darren Mattocks y Giles Barnes (Michael Bradley achicó la brecha para los locales).
Haití es el único seleccionado del Caribe que se alzó con el trofeo: en 1973 sacudió a toda América al quedar por encima de México en el hexagonal final disputado en Puerto Príncipe. El bonus track fue la clasificación mundialista para Alemania 1974, que si bien fueron puras derrotas, se cerró la etapa más brillante a nivel futbolístico del que es considerado el país más pobre del Continente Americano.
Jamaica demostró que no se achica ante los grandes rivales. Ya se cargó a los Estados Unidos hace 2 años y a México en la presente edición. Ambos en semifinales. Tiene 11 leones en el campo de juego que sueñan con llegar al Zion, esa tierra prometida que menciona la cultura rastafari.
Estados Unidos necesita reinventarse y aprovechar las últimas funciones de sus veteranos actores como Tim Howard, Clint Dempsey o Michael Bradley. Sin México en el camino, es la oportunidad ideal para tomar impulso hacia Rusia, con un título bajo el brazo.
“El fútbol es una habilidad en sí misma. Todo un mundo; un universo por sí solo. Yo lo amo, porque debes tener la suficiente destreza para jugarlo. ¡Libertad! ¡El fútbol es libertad!”, dijo un tal Robert Nesta Marley Booker… mejor conocido como Bob Marley. ¿Algo que agregar? Sí, a veces también se juega con el corazón.
(Foto: Sports Illustrated)