Boca Juniors Liga Profesional

Esa maldita rodilla

La rotura de ligamentos de Frank Fabra en su rodilla izquierda se suma a lesiones similares que sufrieron Darío Benedetto, Sebastián Pérez y Fernando Gago. Un verdadero karma que persigue al bicampeón del futbol argentino. 

En pleno receso, con el plantel de vacaciones y la dirigencia en plenas tratativas para sumar refuerzos de cara a un segundo semestre cargado de actividad, el club campeón de la última Superliga recibió una noticia inesperada desde la lejana Milán: allí, el seleccionado colombiano dirigido por José Pekerman se concentró previo al viaje a Rusia para disputar la Copa del Mundo. Y en una de esas prácticas, Frank Fabra, lateral izquierdo titular del “xeneize”, sufrió la rotura del ligamento anterior de la rodilla izquierda.

Entre seis y ocho meses demandará la recuperación del defensor cafetero que el día jueves fue operado éxitosamente por el Dr. Jorge Batista. Un verdadero dolor de cabeza para Guillermo Barros Schelotto que deberá salir a buscar un reemplazo de jerarquía para que dispute el puesto con Emmanuel Más. Pero también un inconveniente mayor para el propio Fabra: a la tristeza inmensa de perderse el Mundial, se le suma el perjuicio de verse frustrada la posibilidad de emigrar al mercado europeo cuando había rumores fuertes que lo ubicaban en la Fiorentina de Italia.

El caso de Fabra es uno más en la lista de lesiones graves en rodillas que aquejan a Boca. Si bien la lesión del colombiano se produjo estando con su selección y puede atribuirse a la mala fortuna, es indudable que este tipo de afecciones persiguen al club de la Ribera.

En el último tiempo Fernando Gago (rotura del ligamento cruzado lateral interno de la rodilla derecha jugando con la Selección, con una recaída y con antecedentes previos), Sebastián Pérez (ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda) y Darío Benedetto (rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha) son algunos de los casos más resonantes que sacudieron al planeta azul y oro.

DOLOR. Gago en el suelo luego de su segunda rotura del tendón de Aquiles FOTO: Clarín.

“¿Vos pensas que se produjeron más lesiones que en otros clubes? A mí me molesta que digan esas cosas. En todos los clubes pasa esto de las lesiones. Si vos ves a la velocidad que se entrena, la intensidad con que se juega… ¡Pavón corre a 34 kilómetros por hora! Tiene que frenar en una baldosa  y salir para el otro lado. Yo todos los días rezo para que no se le quede el pie trabado y le explote la rodilla”, expresó a fines del año pasado Javier Valdecantos, preparador físico del Boca de Guillermo.

Es muy conocido en el ambiente el trabajo al límite que lleva a cabo Valdecantos con los planteles que trabaja. Pero también se sabe que cuida mucho de los jugadores: es recordada la imagen que captaron las cámaras de televisión el 17 de mayo pasado, cuando con el partido 5-0 a su favor ante Alianza Lima por la Copa Libertadores, Guillermo mandó a llamar a Fernando Gago para que ingrese a los 71´. “¿Es necesario?”, se lee que le dice Valdecantos a Ariel Pereyra, colaborador del “Mellizo”.

Gago, previo a este partido, había sumado 69 minutos en su regreso oficial ante Huracán. Y el caso de él sí es particular: en su vuelta al “Xeneize”se rompió el tendón de Aquiles izquierdo en dos oportunidades y en ambas enfrentando a River. La primera fue en septiembre de 2015 y la segunda en abril de 2016, ya bajo la dirección técnica de Guillermo. Tras la recuperación, el nivel que exhibió fue en alza lo que le valió el llamado de Sampaoli para el choque con Perú por las eliminatorias.

El 5 de octubre de 2017, pocos minutos después de haber ingresado en el partido contra los incaicos, “Pintita” realizó un mal movimiento cuando intentó girar y al instante supo que era de gravedad: “Me rompí los cruzados”, le dijo a Lionel Messi dentro de la cancha. Poco después se confirmó la lesión en el ligamento cruzado lateral interno de la rodilla derecha.

La cercanía del Mundial de Rusia y su deseo de revancha luego de la final perdida en Brasil 2014 hicieron que trabajara a contrarreloj. Apenas cuatro meses y medio después de la operación, el 1 de marzo Gago recibió el alta médica y comenzó a entrenarse a la par de sus compañeros. Pero quizás este apuro le jugó una mala pasada: el 6 de marzo sufrió dolores en la rodilla y estudios posteriores confirmaron que se habían desprendido adherencias del ligamento operado. 

El sueño de Rusia quedó definitivamente sepultado para Gago que el 9 de abril pudo volver a entrenar con normalidad. El 5 de mayo jugó el partido de reserva ante Unión para luego retornar oficialmente ante Huracán. Sin lugar a dudas, el regreso de Gago es sumar un refuerzo para el entrenador “xeneize” debido a la cuota de fútbol que otorga al mediocampo y que en este último tiempo extrañó en demasía. El cinco “xeneize” aprovechó este receso para viajar a Barcelona y consultar a otros especialistas para que lo ayuden a fortalecer su rodilla y poder realizar con tranquilidad la pretemporada.

Sebastián Pérez fue otro que vio trunco su sueño de disputar la Copa del Mundo con Colombia por el perjuicio que le ocasiono su lesión. Pérez sufrió durante la práctica del 6 de abril del año pasado la ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. Regresó a las canchas el 14 de enero de este año en un amistoso de verano ante Godoy Cruz que arrojó una victoria del “Tomba” por 3-2.

Este inconveniente le hizo perder terreno en la consideración de Guillermo que ya de por sí lo tenía como segunda o tercera alternativa en ese sector del campo de juego. El colombiano disputó varios partidos en la reserva de Schiavi hasta que en abril se negó a seguir formando parte del mencionado plantel a la espera de tener una nueva posibilidad en la primera.

Las lesiones y suspensiones “obligaron” a Guillermo a utilizarlo en algunos partidos sobre el final de la temporada. Los pocos minutos sumados hicieron que José Pekerman lo excluyera de la lista final de Colombia que viajó a Rusia. Y su futuro en Boca es una incógnita.

Ni que hablar de lo inoportuna que fue la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha para Darío Benedetto. Goleador del torneo local, con un gran momento futbolístico, amado por el hincha de Boca y pieza clave en el andamiaje del “Xeneize”; todos méritos que le valieron la soñada convocatoria a la Selección por parte de Jorge Sampaoli.

GOLEADOR. Benedetto y una lesión que le impidió viajar a Rusia FOTO: Clarín

Estuvo en el banco frente a Uruguay e ingresó en el choque ante Venezuela. Y luego fue titular en los dos últimos partidos por eliminatorias ante Perú y en el duelo clave con Ecuador. Se había ganado un lugar importante en la consideración del entrenador argentino quien lo convocó para los amistosos posteriores con Rusia y Nigeria.

Sin embargo, el 19 de noviembre, durante el partido que a la postre fue victoria de Racing 2-1 en la Bombonera, el “Pipa” mostró síntomas de mucho dolor en su rodilla derecha y debió ser reemplazado a los 37 minutos del complemento. Posteriormente, se confirmó la gravedad de la lesión y el sueño de Benedetto de vestir la celeste y blanca en el Mundial se esfumó por completo. Ah, antes de salir había anotado de penal ante la “Academia”. Benedetto cumplió con los plazos de recuperación y se apresta a desarrollar con normalidad la pretemporada para volver a ocupar el centro del ataque “xeneize”.

“Es muy difícil que termine un partido y no tengas alguno que se tironeó, que le hayan dado una patada en la rodilla o algo. Es muy complejo todo: son batallas, no partidos. Es muy propenso a que pasen estas cosas. A uno le duele porque generalmente apuntan al profe, pero es muy difícil que no pase por cómo se está jugando al fútbol. Es un tema del juego, no de los jugadores“, agregó Valdecantos en referencia al tema.

Frank Fabra es el último caso de este tipo en el club de la Ribera, donde prenderán velas para que las lesiones de este tipo cesen y permitan a Guillermo disponer del plantel completo para la triple competencia que se avecina. Y sino… ¿el Brujo Manuel estará disponible?

Imagen destacada: Clarín

Lucas Blanco

Cuando pense que esto era una etapa pasada y perdida de mi vida, Dios quizo que nuevamente me reencuentre con esta pasion. Y el que entiende de "pasiones" (como bien dice el personaje de Guillermo Francella en el "Secretos de tus Ojos) no la cambia por nada. A lo sumo, la posterga, la oculta, pero siempre esta latente hasta que vuelve a despertar. Y un compañero de trabajo hizo de "despertador". Y aqui estoy junto a la gente del Rincon que con mucha generosidad me abrieron las puertas de este "lugarcito" que es combustible para mi vida. El futbol, el deporte en general. Los tatuajes. Los bichos. Los libros. La musica. Lo nacional y popular. Los codigos. Mis otros pasiones que me convirtieron en este loco enamorado que esta aqui para aportar lo poco sabe pero con muchas ganas.

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