Este domingo, con un marco ideal en el sur, Banfield le ganó a Vélez y se quedó con los 3 puntos. Lo mejor del partido fue el folklore de ambas parcialidades que le sumaron magia al espectáculo.
Por la fecha 7 del Torneo de Primer División, en el Estadio Florencio Sola, el equipo de Julio Falcioni venció al grupo de Omar De Felippe, un encuentro que suponía un duro partido y así fue: juego cerrado, con poco fútbol y sin acción.
El primer tiempo fue en gran parte del Taladro, que intentaba por todas las bandas esquivando a un flojo mediocampo de este Vélez sin carácter.
En los primeros minutos, las más claras fueron para el dueño de casa de la mano de Nicolás Bertolo, con una pelota que pega en el travesaño, y acto seguido el juvenil Luciano Gómez. Promediando el primer tiempo, Vélez empezó a despertar pero no podía romper espacios ni lastimar por más ordenado que sea y pases claros que diera. Más tarde y antes de ir al descanso, haría lo suyo Brian Sarmiento pero Fabian Assmann salvaba con una buena actuación en el arco rival.
El segundo tiempo fue más equilibrada la intensidad de juego de los conjuntos, y hasta por momentos aburrían. Por parte de Banfield, se notaba el cansancio de Bertolo y Silva, quienes volvían de estar luego de unas semanas parados por lesión, y algo desgastados los juveniles Gómez y Cecchini, quienes más tarde saldrían para darle espacio a Bettini y el Chiqui Pérez, respectivamente.
El partido volvió a ser interesante a los 30 minutos del segundo tiempo cuando JCF hizo el primer cambio, entró Thomas Rodríguez por Bertolo, que fortaleció y le dio ritmo nuevamente al Taladro. Cuando parecía que se firmaba el empate, apareció -por un mal despeje del conjunto de Liniers- Brian Sarmiento para darle un centro a Santiago Silva que utilizó el pie izquierdo para poner el gol que le devolvió la victoria al conjunto del sur. Una vez más, aparece el Tanque reavivando la ley del ex, como siempre: es el peor ex de todos.
Fueron los últimos quince más movidos e interesantes del partido, porque Vélez no se quedó quieto y tuvo respuesta en cada ataque y contrataque que se daba. En el último minuto se quedó con el grito atragantado, gracias a una excelente respuesta de Hilario Navarro que apareció y defendió el resultado.
Banfield se hace fuerte de local, recupera la identidad y por momentos muestra destellos de fútbol. Sin dudas, esto le da confianza a un equipo que necesita encontrar regularidad. Esta victoria lo posiciona en el décimo lugar con 11 puntos.
El próximo encuentro, por la octava jornada del Torneo, se dará el viernes a las 21.15 frente a Patronato en Paraná.
Foto: @CAB_oficial
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