El poderío económico de Arabia Saudita le permitió a 9 jugadores de ese país sumarse a la Liga Española. Se trata de un convenio entre ambas federaciones donde entra en juego dinero, nuevos mercados, posibilidad de desarrollo para los involucrados y un negocio donde todos ganan.
¿Quién podía imaginarse que la poderosa Liga Española, donde brillan entre otros Messi y Cristiano Ronaldo, iba a hacerle lugar a jugadores desconocidos de la liga de Arabia Saudita? Nadie. Siempre existe la posibilidad que la liga de la madre tierra salga a buscar refuerzos en países de menor envergadura, especialmente aquellos con la chequera más chica. Pero era difícil pensar que integrantes de “Los hijos del Desierto” pudieran darse ese gusto.
El famoso “billetera mata galán” de nuestros pagos se aplica a la perfección para esta situación: los billetes que sobran en la Liga de Arabia Saudita (país que nada en petróleo) hicieron posible que 9 jugadores de la nación del Golfo Pérsico desembarquen en la liga de Messi y compañía durante 6 meses.
La trama es bien sencilla: Se firmó un acuerdo entre La Liga, la General Sports Authority y la Federación de Arabia Saudita, por el cual los jugadores llegarán cedidos por sus clubes de procedencia durante los próximos seis meses y sin ningún tipo de costo a los equipos que los contrataron. Al contrario, le significan ingresos económicos que en algunos casos pueden llegar hasta los cinco millones de euros.
Levante, Villarreal y Leganés, en Primera División; Numancia, Rayo Vallecano, Valladolid y Sporting en Segunda, son los clubes involucrados en esta operación que ha despertado sorpresas, dudas y polémica.
La sorpresa es la llegada en sí de estos jugadores, de los cuales 3 únicamente juegan en la Selección y van a estar con seguridad en el Mundial de Rusia bajo la dirección de Juan Antonio Pizzi: Yahia Al-Shehri (Leganés), Fahad Al-Muwallad (Levante) y Salem Al Dawsari (Villareal).
Los restantes 6 jugadores se completan con un jugador de cierto rodaje Ali Al Namer (Numancia) y el resto de jóvenes que buscan justamente un desarrollo en una de las mejores ligas del mundo: Marwan Othmnan (Leganés), Jabor Issa (Villareal), Abdulmajeed Al Sualihim (Rayo Vallecano), Abdullah Al Hamdan (Sporting) y Nooh Al Mousa (Valladolid).
Una de las dudas que despertó esta “avanzada” árabe es si tanto dinero puesto por la Federación Asiática implicaba el compromiso de que los jugadores tuvieran minutos en sus nuevos equipos: “No hay ni una sola cláusula para jugar un minuto”, expreso en su momento Quico Catalán, presidente del Levante.
La Liga Española ve en este acuerdo la posibilidad de consolidar presencia y mercado en Arabia. Los derechos de televisión, aseguran, crecerán de manera importante con la llegada de los futbolistas sauditas. Y esto irá de la mano del interés de varias firmas comerciales. De hecho, cada uno de los jugadores que llegan a España lo hace con un patrocinio detrás.
A cambio, y vinculado con lo que contábamos más arriba, los dirigentes de la Federación Árabe esperan entrenamientos de calidad para sus compatriotas y la posibilidad de que alguno de ellos pueda disputar partidos en un torneo que nunca tuvo entre sus jugadores a un nacido en este reino del Golfo Pérsico.
La polémica no podía ausentarse. Es obvio que si no fuese por el dinero en juego sería imposible que esto sucediera. Javier Tebas, presidente de la Liga, defendió la movida y expreso que “se trata de un acuerdo muy positivo, porque va a permitir a clubes modestos, con dificultades para desarrollar su marketing internacionalmente, ser atractivos en otros mercados. Las estrellas árabes no son seguidas únicamente en sus países, sino en todo el mundo árabe”.
Pero Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) manifestó su desacuerdo mediante un comunicado en el cual su nuevo presidente, David Aganzo, advirtió sobre un nuevo modelo que “prioriza el aspecto económico sobre el deportivo, sacrificando la esencia del deporte y anteponiendo el negocio a la promoción y formación de nuestros futbolistas”.
Otro tema a tener en cuenta es que estos nueve futbolistas sauditas tendrán que adaptar sus hábitos religiosos, alimenticios e incluso de higiene para combinar en España su fe en el Islam con la actividad que desarrollarán. Dentro de su rutina se encuentran las cinco oraciones al día, la visita a la mezquita de cada viernes; por su dieta, en la que no está permitida la carne de cerdo, y por su rechazo a mostrarse desnudos ante sus compañeros de equipo,
UN SOLO DEBUT Y NADA MÁS
La noticia de la llegada de los jugadores árabes a la Liga Española se dio a conocer a mediados del mes pasado. Pero hasta ahora, novedades deportivas vinculadas con ellos muy escasas.
Todos han sido presentados en sus nuevos clubes. Todos se están entrenando. Pero sólo uno debutó: Fahad Al-Muwallad hizo su estreno hace 3 días atrás con la camiseta del Levante en un amistoso ante el UFA FC ruso y que finalizó igualado 1-1 y con una actuación más bien discreta de él.
El jugador de los “Hijos del Desierto” se mostró muy voluntarioso, corriendo mucho, pero con escaso rigor táctico, sin duda uno de los motivos por los que todavía no ha entrado en ninguna convocatoria.
Del resto se puede contar que el entrenador del Leganés, Asier Garitano, expresó sobre Yahia Al-Shehri: “No lo conozco, no le he visto. Vendrá, lo veré e intentaré sacar lo que tenga como con cualquiera. Pero no podría decir si tiene nivel o no lo tiene. Sé que es internacional pero no sé el nivel que tiene ni que puede dar. Lo desconozco. Todo el mundo sabe lo que yo quería deportivamente. Pero no dejo de ser un entrenador y mi labor será intentar sacar rendimiento a los jugadores que me traigan”.
Quizás el Villarreal sí empezó a captar el rédito económico que deseaba al sumarse a la contratación de estos jugadores. En la rueda de prensa en la que oficialmente se presentó a Salem Al Dawsari y Jabor Issa, ofrecida en directo por la multiplataforma “Live” del club, alcanzó las 50 mil reproducciones en el momento de ser ofrecida. Cuesta creer que esto originó el colapso del servidor del “Submarino Amarillo”. A la par, los videos subidos por el club a las redes sociales alcanzaron las 300 mil visitas. Y la cuenta en árabe que el Villareal inauguró ese mediodía, superaba por la tarde los 23 mil seguidores.
En síntesis. Una prueba más de como el amor a la camiseta, la pasión por el futbol y los sentimientos que despierta la pelota cada vez que rueda, van quedando atrás y son superados por otros valores. El valor del negocio, del dinero y de que en el fútbol todos ganen algo. Y que ese “algo” no sea una victoria o un título. Sino billetes y más billetes.
INFORME: LUCAS BLANCO
Imagen destacada: Prensa La Liga
