Boca ya está en Buenos Aires luego de perder la Copa Libertadores a manos de River. De la ilusión a la pesadilla sin escalas. Y un futuro lleno de dudas. Se va Guillermo? Que pasa con Tevez? Se retira Gago?.
Paso un día del domingo negro que vivió el mundo Boca y el mazazo aún se siente. Quizás una de las derrotas más dolorosas de la rica historia xeneize. Y es que la consagración de River fue un golpe tremendo a la ilusión que envolvía a la galaxia azul y oro. Porque más allá de haber perdido contra un rival con el que se podía perder (sin ir más lejos, Boca no le había podido ganar nunca en el año), en el club de la Ribera se respiraba la sensación de que la “maldita” séptima Libertadores estaba al alcance de la mano. Pero el sueño se convirtió en una pesadilla de la que costara despertarse.
Lo que se perdió (Mundial de Clubes, Recopa Sudamericana, dejar a River fuera de la Libertadores 2019, mucha plata), ver al rival de toda la vida alzar la Copa más preciada, la posibilidad nula de entrar en la historia grande de Boca, evaluar que la final se perdió por detalles y la sensación de que nuevamente el equipo de Guillermo fallo en una instancia clave, son factores que contribuyen a la sensación de desazón y tristeza que se percibe en cada fanático xeneize.
Ayer el dolor fue en Madrid y hoy se palpo en la llegada del plantel xeneize a la Argentina. Muy atrás (aunque fue hace seis atrás apenas) quedo la despedida antes de viajar a España donde abundaba la algarabía, la ilusión y el optimismo. Hoy el panorama fue totalmente diferente. Rostros serios, cabizbajos, la mirada perdida. Una síntesis perfecta del ánimo que anida en jugadores y cuerpo técnico.
Detenerse a pensar en que salió mal ayer o porque no se logró el objetivo propuesto, de mucho no sirve ahora. En el xeneize el futuro está a flor de piel. Es que la derrota con River abrió muchos interrogantes que habrá que resolver en el corto plazo, algunos muy importantes como la continuidad de Guillermo Barros Schelotto. Aunque el plantel entro de licencia, hay decisiones por tomar. El golpe de ayer fue como un terremoto y ahora debe empezar la “reconstrucción”.
La principal duda es en torno al entrenador. Y tiene una respuesta casi segura: Guillermo Barros Schelotto no va a continuar siendo el DT de Boca. Por decisión propia y también dirigencial. A lo largo del año muchos fueron los rumores de que, independientemente del desenlace en la Copa, Guillermo tenia tomada la decisión de irse en diciembre. Y se mencionaba puntualmente que su futuro estaría en Estados Unidos.
Sin embargo el, como la dirigencia, se encargaron de decir una y otra vez que a fin de año se evaluaría el proceso para tomar una decisión. Es casi imposible que siga. Hay desgaste con el plantel, cansancio del entrenador y el golpe de ayer es difícil de asimilar. También muchas críticas de hinchas hacia algunas decisiones tomadas en la final. Si no sigue Guillermo…quien viene? Alfaro, Heinze, Mohamed, Russo, Pekerman son algunos de los nombres que sonaron. Pero esa es otra historia.
Hay dos nombres más en cuales se depositan dudas por el peso propio que tienen: Fernando Gago y Carlos Tevez. En el caso del primero, la rotura del tendón de Aquiles derecho parece condenarlo a dejar el futbol. O tendrá fuerza para encarar una recuperación de seis meses como ya lo hizo con otras lesiones a lo largo de su vida?
En el caso de Tevez hay mucho para analizar. Acepto el rol “secundario” que le propuso Guillermo con total profesionalismo y mostrando, además, buenos pasajes de futbol cada vez que ingreso. Pero seguramente los pocos minutos de los que dispuso ayer le habrán molestado. Se ira de Boca? Dejará el futbol? Difícil. Aún le queda un año más de contrato y al regresar de China manifestó “volví para darle al hincha de Boca la Libertadores”. Seguramente no está en su cabeza alejarse con una imagen triste como la de ayer. Y además, un hipotético cambio de DT, podría significar para el más minutos en cancha.
Uno de los grandes ausentes ayer, Edwin Cardona, no seguirá en Boca. Comprar su pase implicaría un desembolso de dinero que Boca no está dispuesto a realizar. El mismo camino seguiría Cristian Espinosa. Carlos Lampe retornara al Huachipato. Y resta saber que pasara con jugadores como Gino Peruzzi o Bébelo Reynoso.
Un ítem aparte merecen los jugadores que eran una fija para irse luego del Mundial y se quedaron por la Libertadores. Cristian Pavón nunca recupero el nivel previo a la Copa del Mundo. Y Wilmar Barrios siempre dejo entrever que su estadía en el xeneize finalizaba en diciembre. Pero por ninguno hay ofertas aun.
Nahitan Nandez, fiel representante de la garra charrúa y un jugador hecho a la medida de Boca, fue uno de los más reconocidos por los hinchas debido a la entrega exhibida ayer y en partidos previos. Se ganó al fanático xeneize pero habrá que ver que quiere hacer el. A mitad de año mostro intenciones de irse por el poco lugar que le daba Guillermo. Hoy se ganó un lugar en los once. Un tema a resolver.
Boca quiere dejar atrás cuanto antes el domingo negro vivido en Madrid. La herida provocada por la superfinal llevara mucho tiempo en cicatrizar. Entre este pasado oscuro reciente y el futuro que llego de golpe, se dirime el xeneize. Un diciembre para el olvido, una derrota para la historia y el sabor amargo de un sueño hecho trizas.
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