Los surcoreanos se impusieron ante una débil Honduras. Un triunfo necesario para encarar positivamente el Mundial.
A tan sólo once días de enfrentarse con Suecia, Corea del Sur ha mostrado a sus veinticinco jugadores más representativos del momento. Vale recordar que el 5 de junio se dará la lista definitiva de los veintitrés elegidos. Honduras fue la Selección que decidió realizar el amistoso, parándose con un 4-4-2 en busca de los goles de Roger Rojas y Castillo. Los Tigres hicieron exactamente lo mismo, de la mano del capitán Son Heung-Min.
Durante la mayor parte del primer tiempo, Corea del Sur estuvo muy bien parada en sus primeras dos líneas aunque se ha notado un déficit en la profundidad final frente al portero Escober.
Los últimos cinco minutos de la primera parte fue el despertar hondureño: controló el balón y le generó dolores de cabeza a su rival, que llegó tarde para cortar el esférico.
El dominio final de Honduras se tradujo en el comienzo del segundo tiempo hasta el minuto 60. Son quebró el marcador y la lógica del partido.
Corea recomienza su dominio con un 73 % de posesión del balón. Al minuto 75, Moon conectó un cabezazo para poner el 2-0. Él fue un jugador importante en el encuentro, generando despliegues sorpresivos para su rival.
Si bien Honduras realizó un partido digno, no logró superar la competitividad de los mediocampistas y delanteros surcoreanos. Llamado de atención para la defensa asiática por mostrar lentitudes que le han impedido conectarse plenamente con el resto del grupo.
Aún así, hay tiempo suficiente para limar los errores más superficiales y no reproducir el rendimiento del Mundial pasado.
Foto principal: El Universal
