San Martín recibía la visita de Quilmes, en el marco de la fecha 23 del Torneo de Primera División, fue finalmente victoria para los locales por un tanto contra cero en la última jugada del partido.
En una noche espléndida, San Martin y Quilmes se veían las caras, ambos con la urgencia y la necesidad de cosechar puntos para escaparle a la zona baja, la visita con más necesidades, y que venía de su primer triunfo la fecha pasada, en los locales la historia de a poco se va torciendo y ya suma seis partidos sin conocer la derrota.
El partido empezó muy parejo, con Quilmes buscando en ataque, pero sin poder llevar peligro al arco de Corti, de a poco San Martín comenzó a hacerse dueño de la pelota a través de Lugo y Gelabert que armaban un buen tándem en la mitad de la cancha, las primeras situaciones de riesgo en el encuentro fueron para el Verdinegro, que a través de dos cabezazos de Molina intentaba inquietar el arco de Rigamonti. El Cervecero, por su parte, intentaba con las contras pero no podía concretar jugadas de riesgo en ataque. Antes de que la primera mitad se fuera, Lugo fue quién remató abajo desde afuera del área y contuvo Rigamonti, que dio un rebote largo y Molina de media vuelta volvió a probar al buen arquero cordobés.
Así, de esa forma, se terminó la primera mitad, con el marcador cerrado y con un leve predominio en favor de los locales que no pudieron concretar las que tuvieron.
Ya en la segunda mitad, fue San Martín quien siguió buscando la apertura del marcador, ante un ya muy retrasado Quilmes, las opciones más claras fueron para los de Gorosito, que no podían concretar, al minuto del segundo tiempo, Lugo remató y en la línea salvó Trombetta, las otras chances llegaron en la cabeza de Gelabert, tras un centro de Lugo y en un remate de Molina que se iba pegado al palo derecho. La visita, muy inconexa por momentos, tuvo su chance en un cabezazo de Contreras, pero no mucho más para los dirigidos por Cristian Díaz.
El partido parecía que se terminaba inexorablemente en empate, pero eso no estaba en los planes de Joaquín Molina que luego de un centro de Aguilar apareció inexplicablemente sólo por el segundo palo, y definió cruzado para la alegría de todo el pueblo viejo. Para los locales, fue la segunda victoria consecutiva en esa condición. Quilmes, por su parte, no pudo llevarse algo de su viaje a San Juan y se complica en la zona baja.
Foto principal: Delfo Rodríguez
