Con doblete de Cristiano -que además alcanzó los cien goles por Champions-, los de Zidane superaron 2-1 al Bayern en el Allianz Arena. Vidal había puesto en ventaja al local, pero luego marró un penal que desmoronó al conjunto bávaro e inició la remontada de un Madrid que encaminó muy bien la serie de cara a la vuelta.
Se jugaron los primeros noventa minutos de uno de los duelos más atractivos de cuartos de final, entre un Bayern Múnich de sólido momento en la temporada y un Real Madrid que quiere seguir estableciendo su dominio europeo. Los locales no contaron con Robert Lewandowski, lesionado, mientras que el Madrid no contó con Pepe para este juego. Tras un arranque muy parejo en el que los dos se estudiaron, la primera chance clara del partido llegó para el equipo Merengue. Toni Kroos encontró con su centro a Karim Benzema, que ganó muy bien de arriba pero su cabezazo de pique al suelo impactó contra el travesaño para luego ser controlado por Manuel Neuer. Sin embargo, la respuesta de los alemanes fue letal: córner de Thiago Alcántara y cabezazo demoledor de Arturo Vidal, que vulneró la resistencia de Keylor Navas. Luego del tanto, el cuadro muniqués superó a su oponente dentro del campo, manteniéndolo lejos de su arco y generándole problemas atrás. Un desborde de Arjen Robben que encontró nuevamente a Vidal llegando por atrás pero esta vez su golpe de cabeza se fue por arriba del arco. Un Madrid atontado recién pudo contestar a poco del descanso y en una maniobra aislada, mediante un remate lejano de Cristiano Ronaldo que Neuer despejó a un costado. En una de las últimas de esa primera parte, sucedió un hecho clave en el encuentro. Tras una recuperación alta del Bayern, el balón le llegó a Frank Ribèry que tras amagar sacó un disparo que fue bloqueado por Daniel Carvajal con el pecho, mas el juez Nicola Rizzoli sancionó un penal inexistente para el cuadro bávaro. Vidal se hizo cargo de la ejecución, sin embargo su intento de “asegurar” le jugó en contra ya que elevó su potente tiro por arriba del travesaño.
El penal malogrado por los alemanes pareció tener un efecto positivo en los de Zinedine Zidane, puesto que ni bien comenzado el segundo tiempo cayó el gol del empate. Carvajal recibió de Casemiro y le puso un centro exacto a Cristiano para que el goleador del Merengue iguale la contienda. Desde ese momento el conjunto español comenzó a dominar el partido, imponiendo su presencia en el mediocampo de la mano de Casemiro y generando superioridad por las bandas con los laterales. Pronto nomás llegó un cabezazo de Bale y una respuesta magnífica de Neuer, enviando la pelota por arriba del arco. Un Bayern tambaleante terminó de derrumbar su imagen cuando Javi Martínez se ganó dos amonestaciones en un corto lapso de tiempo y dejó a su equipo con diez, generándole un dolor más de cabeza a Carlo Ancelotti. El italiano introdujo a Juan Bernat para rearmar la defensa, pero su elenco siguió mostrando graves inconvenientes colectivos, desbordado e incapaz de generar ataques. Un tiro libre de Sergio Ramos que salió apenas afuera fue un nuevo aviso de un Madrid decidido a ponerse arriba.
Entrando a los veinte minutos finales del encuentro ya era todo del Merengue, que hizo revolcar a Neuer en dos oportunidades. Una nueva trepada de Carvajal, intratable durante el complemento, derivó en un centro a Benzema que chocó con la figura de Neuer. El golero campeón del mundo volvió a sostener a su equipo en la igualdad cuando le sacó un potente remate de Ronaldo a puro reflejo. Sin embargo, a trece del final llegó el desnivel en el marcador a favor de los de Zidane. El joven Marco Asensio recibió en la izquierda y metió un muy buen centro para Cristiano, que esta vez venció al arquero alemán atacando la pelota con la zuela. Además de anotar un tanto clave, el portugués llegó al centenar de goles por Champions League, transformándose en el primero en la historia en hacerlo. El Madrid siguió siendo superior hasta el final y pudo haber aumentado la cuenta. Ronaldo desbordó por derecha y sacó un centro para Marcelo, cuyo remate salió apenas desviado. En tiempo de descuento, el visitante llegó a un tercer gol que hubiera dejado la serie casi resuelta cuando Ramos conectó un centro de Kroos, pero el juez de línea le anuló correctamente su tanto por offside. Fue final en Múnich, con una merecida victoria e importante para un Real Madrid que parece haber hecho lo más difícil en la serie ante un coloso del tamaño del Bayern, que sin embargo y a pesar de mostrar una mala imagen en el complemento, nunca debe ser dado por muerto. La serie sigue abierta, aunque los bávaros deberán dar lo mejor de sí para torcer la historia ante un rival difícil de mover cuando está con las de ganar.
Resumen del partido:
Foto destacada: Realmadrid.com (@realmadriden)
