Las nórdicas se repusieron de la gran ausencia de Ada Hegerberg y encadenaron 3 triunfos al hilo, para sacarle un título de ventaja a Suecia, entre los seleccionados que suelen participar de este certamen.
La edición número 26 de la Algarve Cup tuvo una celebración en clave vikinga. Noruega barrió 3-0 a Polonia en la final y se consagró campeona por quinta vez en su historia.
Lejos de las 10 conquistas de Estados Unidos – desde hace 4 años decidió formar su propio torneo y le dio la espalda la Algarve Cup – las entrenadas por Martin Sjogren necesitaban volver a confiar en ellas mismas.
Es que la piedra preciosa dijo adiós y Noruega perdió a su más valioso talismán: Ada Hegerberg dijo basta y renunció a la Selección. El conflicto se agravó luego que la lucha por la igualdad se haya visibilizado: el histórico acuerdo por equiparar los salarios tanto en hombres como mujeres se logró. Pero Ada sintió que no era suficiente.
“No es todo sobre el dinero”, declaró en una entrevista concedida a la CNN.
“Se trata de la preparación, de actuar, del profesionalismo, puntos muy claros que les presenté directamente a ellos cuando tomé mi decisión”, añadió la 3 veces campeona de la UCL con la camiseta de Lyon.
El sueco Sjorgen se reunió varias veces con la ganadora del Balón de Oro 2018 pero no hubo forma de convencerla para su regreso. Entonces debió planificar la preparación con un equipo que venía golpeado por la eliminación de la Eurocopa de hace 2 años.
Un par de éxitos ante Dinamarca (2-1) y sobre China (3-1) dejaron en buena posición a Noruega con vistas al partido decisivo.
Polonia, la peor rankeada del torneo, sorprendió al golear 3-0 a España y al dar cuenta de Holanda por la mínima.
Escocia – debutante en la próxima Copa del Mundo y rival de la Argentina – perdió 1-0 con Canadá y se recuperó con un contundente 4-1 sobre Islandia.
Al ser las únicas que metieron 2 plenos de victorias, noruegas y polacas se encargaron de definir el trofeo, mientras que canadienses y suecas decidieron quién se quedaría con el bronce.
Empate sin goles entre Canadá y Suecia en el Estadio Algarve pero triunfo 6-5 en los penales para las americanas, que supieron ser campeonas en 2016.
La gran definición se llevó a cabo en el Estadio Municipal Bela Vista de Parchal y allí no hubo equivalencias. Noruega superó 3-0 a Polonia con anotaciones de Isabell Herlovsen (24´), Caroline Hansen (65´) y Karina Savik (74´) y gritó campeona 21 años después.
España – ganadora de la edición 2017 – apenas pudo conformarse con el séptimo puesto, tras vencer 2-0 a Suiza (goles de Jennifer Hermoso y de Florijana Ismaili en contra). Pésimas actuaciones de Holanda – campeona en 2018 – con un inesperado último lugar y de Portugal – dueña de casa – con un sufrido décimo puesto (luego de ser goleada 4-1 por Islandia).
Noruega tiene la capacidad de reinventarse. Por supuesto que da mucha ventaja sin Ada Hegenberg: imaginen a Estados Unidos sin Álex Morgan, Australia sin Samantha Kerr o la Argentina sin Estefanía Banini. Pero el aliciente de sentirse campeonas de un prestigioso torneo es la cuota anímica necesaria para encarar el gran objetivo. La Copa del Mundo de Francia está cerca, y estas “Vikingas” quieren tocar las puertas de Valhalla.
(Foto Principal: www.xinhuanet.com)
