El novel equipo de Melbourne ganó en el país vecino gracias al gol de un “hijo pródigo”. El campeón ganó un partidazo en Adelaide y el clásico de los más experimentados de la ciudad olímpica de 1954 terminó con el marcador en silencio.
La espera terminó y al fin se puso en marcha una nueva ilusión, al otro lado del mundo. La 15a edición de la A-League – la Primera División del fútbol de Australia – arrancó este fin de semana y contó con el estreno de una nueva franquicia.
En el Westpac Stadium, Western United hizo su primera presentación oficial con una victoria 1-0 sobre el local Wellington Phoenix. Los “Nix” sufrieron un revés en casa luego de 3 halagos en fila y el responsable fue un viejo conocido de la liga, que tuvo su regreso con gloria.
Luego de su paso por el Sanfrecce Hiroshima nipón, el kosovar Besart Berisha volvió al fútbol donde todavía es el máximo artillero histórico. Y quién mejor que él para iniciar con una sonrisa el andar del “United”.
A los 34´, un centro al segundo palo de Connor Pain fue devuelto al punto del penal por Josh Risdon. En su hábitat natural estaba Berisha, quien solamente la tuvo que empujar para gritar su diana número 117.
El vigente rey protagonizó el encuentro más vibrante de esta primera fecha. En su visita al Coopers Stadium, Sydney FC derrotó 3-2 a Adelaide United y estiró a 3 los partidos sin derrotas.
El segundo artillero de la temporada pasada mostró sus credenciales con un doblete. A los 22´, una mano del danés Jakobsen dentro del área fue revisada por el VAR y el árbitro Alex King sancionó penal. Adam Le Fondre mostró su instinto asesino habitual y sacudió la red local desde los 12 pasos.
El “United” no se repuso del golpe inicial que 6 minutos más tarde llegó el segundo grito visitante. Gran pase filtrado de Milos Ninkovic para Alexander Baumjohann y el alemán tocó al medio para la entrada en soledad de Le Fondre, quien solamente la tuvo que empujar al gol.
Los de Gert Verbeek regresaron al partido con el descuento de Nikola Mileusnic, al minuto 43. Exquisito tiro libre por encima de la barrera y distancia recortada rumbo al descanso.
Al inicio del complemento, el local emparejó las cosas con un gol algo polémico. Pase entre líneas de Ben Halloran para Alhassan Touré, quien ingresó a la tierra prometida y batió al arquero Tom Heward-Belle. Hubo revisión con el VAR por la posición de Touré al momento del pase y la verdad que fue milimétrica. Demasiadas repeticiones y ninguna certeza, por lo que el referí King convalidó el tanto.
La reacción por la victoria estaba al caer, hasta que un error propio hizo todo cuesta arriba. Flojo control del balón por parte de Ryan Strain y Le Fondre se lo robó a pocos metros del área grande. Acto reflejo de Strain que empeoró las cosas, porque no tuvo mejor idea que agarrar al inglés y evitar una ocasión manifiesta de gol. Roja directa para el defensor.
Y a 3 minutos del epílogo, una pelota parada decidió el resultado final. Córner desde la derecha de Brandon O´Neill y cabezazo goleador de Ryan McGowan.
Ni vencedores ni vencidos en la batalla número 29 del clásico de Melbourne que terminó con empate 0-0 entre el Victory y el City, en el Marvel Stadium. El anfitrión mantiene la ventaja en el historial de 12 triunfos sobre 9 de su archirrival (8 empates) pero “The Heart” fue el último en latir ganador con su triunfo 2-1 casualmente en la primera jornada de la temporada pasada.
Dos uruguayos fueron titulares en el conjunto visitante: Marcelo Cabrerar (ex Wanderers) y Adrián Luna (llegó procedente de Veracruz). Ambos hicieron su debut oficial en la A-League.
Western Sydney Wanderers corrigió el rumbo a tiempo y navegó a buen puerto al imponerse 2-1 sobre Central Coast Mariners, en el Bankwest Stadium de la que fuera sede olímpica de los Juegos de 2000.
Fin de la sequía de 4 juegos sin halagos para los entrenados por el alemán Marcus Babbel, que se vieron sorprendidos por la ventaja inicial del visitante.
En efecto, a los 36´ un zapatazo del serbio Milan Djuric desde afuera del área se desvió en un rival y terminó pegada al horizontal del arco defendido por Daniel Lopar.
Los “Wanderers” no se amedrentaron y 5 minutos más tarde nivelaron las acciones. Córner del suizo Pirmin Schwegler y anticipo de cabeza de Mitchell Duke para empatarlo y escribir un nuevo capítulo de la inexorable “ley del ex”.
A 8 minutos del final vino el alivio para el dueño de casa. Una mano de Key Rowles dentro del área fue motivo de consulta con la tecnología. El árbitro iraní Alireza Faghani (sí, en Australia se importa la ley) revisó la jugada y 3 minutos más tarde dio su veredicto: pena máxima.
Duke volvió a castigar a su club de origen y desde los 11 metros selló su doblete y la victoria para los “Wanderers”.
Perth Glory no lo supo sostener y empató 1-1 ante Brisbane Roar en el HBF Park. Agónica igualdad del conjunto visitante, que en el quinto minuto de tiempo adicional pudo desatar la locura.
El subcampeón de la “Gran Final” pasada se adelantó por intermedio de Chris Ikonomidis, a los 34´. Perfecta habilitación del español Diego Castro para el joven extremo y definición cruzada ante el achique Max Crocombe.
Era todo risas hasta que el final se tornó dramático. Minuto 95 y una centro a la olla fue bajado de cabeza por el galés Aaron Amadi-Holloway. Por el medio llegó libre de marcas Roy O´Donovan, quien se arrojó de palomita y estampó la igualdad. Suspenso en la ciudad donde están las mejores olas para surfear porque el VAR entró en escena. La posición del irlandés fue más que dudosa pero la tecnología confirmó que el tanto era válido.
La vedette de la jornada fue sin dudas el VAR y quien todavía no salió a la cancha fue Newcastle Jets. Claro, ahora son 11 equipos y todos los fines de semana habrá alguno que lo mire desde su casa.
(Foto Principal: Hyundai A-League Twitter)
