Paul McCartney tiene un récord muy difícil de igualar. Logró que algunas canciones suyas alcanzaran el número uno en las listas. Primero lo hizo con los Beatles (fueron 27 éxitos en total), es decir, con un cuarteto. Luego lo consiguió con un trío: junto a su esposa Linda y al guitarrista Denny Laine (ex integrante de Moody Blues) formó la agrupación Wings y alcanzó su techo con el hit “Banda en fuga”. En 1982, grabó junto a Stevie Wonder la canción “Ébano y Marfil” y también logró posicionarse en el tope de las listas. En un principio se pensó inocentemente que se hablaba de las teclas de un piano (“negro” = ébano y “blanco” = marfil). Pero encerraba algo más que un instrumento musical: se trataba de un mensaje de igualdad racial.
“Todos sabemos que la gente es la misma a donde sea que vayas; hay un bueno y un malo en cada uno; aprendemos a vivir; aprendemos a darnos el uno al otro lo que necesitamos para sobrevivir juntos, vivos”, dice la canción.
En 1992, hizo su aparición continental el seleccionado de fútbol de Costa de Marfil. Conocidos como “Los Elefantes”, los marfileños entraron en la elite de ganadores de la Copa Africana de Naciones, al imponerse a Ghana 11-10 en los penales (luego de igualar sin goles) en la final disputada en Dakar, Senegal.
Pasaron 20 años del primer éxito deportivo, que el fuerte sentimiento nacionalista y las divisiones por la religión llevaron a Costa de Marfil a una guerra civil.
La muerte de Félix Houphouet-Boigny, el primer presidente electo, acrecentó las luchas por el poder y las divisiones étnicas y religiosas. El conflicto duró 5 años, pero dejó más de 3000 muertos y 750 refugiados.
La figura más relevante en la historia del fútbol de Costa de Marfil es Didier Drogba. El ex delantero del Chelsea inglés – entre otros clubes – es el goleador histórico del seleccionado. Apodado “Tito” porque su abuela era admiradora del líder yugoslavo Josip Broz (el Mariscal “Tito”), Drogba es reconocido no solamente por su habilidad dentro de la cancha sino también por su carisma y humanidad fuera del campo de juego. Su aporte fue esencial para lograr la paz en su país. El partido por las eliminatorias para la Copa Africana de Naciones 2006 entre Costa de Marfil y Madagascar, se jugó en la ciudad de Bouaké por expreso pedido de Drogba. Era en esta ciudad donde se encontraban los focos más peligrosos de la rebelión, pero “Tito” logró un cese del fuego a través del fútbol.
En el año 2007, Drogba fue nombrado Embajador de las Naciones Unidas, y tres años más tarde fue reconocido por la revista Time como una de las 100 personas más influyentes.
“Ébano y marfil viven juntos en perfecta armonía; lado a lado en mi piano de teclado; Oh, Señor, ¿por qué nosotros no?”, cantaban Stevie Wonder y Paul McCartney.
Didier Drogba ayudó a terminar con el horror de la guerra en su país. Y Sir Paul logró el número uno como solista, con la canción “Pipas de la Paz”.
(Foto Principal: Stevie Wonder.es)
